Maradona, Gardel, Evita, el Papa… y ahora Messi

En junio del 2016, en medio de otra debacle de la albiceleste y entre enojo y rabia, Lionel Messi anunciaba su retiro de la selección de Argentina.

La dura caída ante Chile en la final de la Copa América, sumada a los fracasos en Brasil 2014 y las críticas de “pecho frío” -porque sí, hubo muchos que lo cuestionaron así-, el astro se hacía a un lado.

Pero al final, su amor por la albiceleste y el convencimiento de su círculo más cercano, Messi regresó con más hambre, con sed de revancha y en su mejor nivel.

Esto lo llevó a obtener la Copa América en el 2021 ante su acérrimo rival, la selección de Brasil y en el propio Maracaná.

Un año después, parecía que, el hoy “Goat”, se cuidaba con su nuevo club, el París Saint Germain para ir al decembrino mundial de Qatar, a buscar su título, la joya de la corona.

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Marcando un gol en cada fase del Mundial, batiendo los récords de participación y minutos disputados, así como el goleador de la Copa con seis tantos. De todo.

Esto llegó a confirmarlo como una leyenda Mundial y lo puso de la mano de los ídolos argentinos como Maradona, Gardel, Evita y el propio Papa Francisco.

¿Más grande que Maradona?

Al levantar la Copa del Mundo, Messi se convirtió en uno de los jugadores que más ha ganado en la historia del fútbol.

Y es natural creer en un debate entre quién fue mejor: ¿Maradona o Messi?

La respuesta la tendrá cada quién, pero lo cierto es que ambos marcaron una época sin precedentes para la Argentina.

La leyenda de Maradona, fallecido en el 2020, se hizo gigante por su talento y quedó demostrado con la mejor actuación individual de un jugador en un Mundial, como lo fue en México 86.

Pero sus escándalos fuera de la cancha llegaron a querer manchar todo lo increíble que llegó a ser dentro del terreno de juego.

Maradona era lo más argentino que pudo haber, mientras que a Messi muchos le criticaron al inicio marcharse a Barcelona por un mejor futuro.

Ahí se consagró el mejor del mundo, pero sus constantes traspiés con la albiceleste le costaron la crítica del “pecho frío”.

​A los 35 años, el astro argentino puede despedirse tranquilo de sus periplos mundialistas (participó en los últimos cinco): anotó el primero, de penal (23), y el tercero (en la prórroga, 109) en el estadio de Lusail y participó en el segundo, de Ángel Di María (36).

Aunque la corona rompe con una sequía albiceleste de 36 años sin alzar la Copa del Mundo, antes lo hicieron con Mario Kempes en 1978 y Diego Maradona en 1986, la conquista tiene de protagonista especial a un tipo que vio cómo Alemania se la arrebataba de las narices en Brasil 2014.

Ahora, vestido de jeque y por todo lo alto, Argentina festeja su tercer título Mundial y con un Messi que simplemente colecciona uno de los mejores palmarés en la historia del deporte.

Mundial, Copa América, Juegos Olímpicos, Mundial Sub20, Finalissima, esto solo con la albiceleste.

A esto hay que sumarle de todo con el Barcelona. Cuatro Champions League, 10 Ligas de España, siete Copas del Rey, tres Mundiales de Clubes, tres Supercopas de Europa, ocho Supercopas de España y una Ligue1 con el PSG.

Como distinciones individuales, siete Balones de Oro, un FIFA World Player, seis Botas de Oro, un premio Laureus, ocho Pichichis de la Liga, nueve MVP de España, seis veces mejor goleador de la Champions, un FIFA FIFPro, dos balones de Oro en Mundiales, dos veces Jugador de Europa, un Golden Boy, MVP de Copa América.

Con el tango de Gardel de fondo, Argentina vio crecer una nueva leyenda en Qatar, otro ídolo, otro genio por el cual estarán orgullosos como lo hizo la exprimera dama Evita Perón y recientemente el Papa Francisco.