Puntarenas espera jugar en el Lito, pero mantiene abiertas otras posibilidades
Los porteños finalizaron el Clausura con el estadio clausurado.
El Puntarenas no tiene claro cuál va a ser la situación de su estadio, a poco más de una semana del inicio del Apertura 2025.
El Lito Pérez fue clausurado para el final del torneo anterior y los chuchequeros siguen a la espera de una respuesta de las autoridades de Salud.
Héctor Trejos, la cara más visible de la institución, habló sobre este tema.
—Con los trabajos que han hecho, ¿Qué es lo que espera? ¿Qué la resolución sea positiva?
Hay que ser claros en ese tema. El Ministerio de Salud clausura el estadio porque, en el año 2023, emitió una orden sanitaria que solicitaba un estudio estructural del estadio, para determinar si se podía o no tener un aforo determinado de aficionados. O sea, básicamente, para definir cuál era la capacidad del estadio con las instalaciones y condiciones existentes.
Ese documento no se presentó en su momento por parte de la Municipalidad de Puntarenas, y eso dio pie al cierre del estadio, por el no acatamiento de la orden sanitaria.
Entonces, lo que se hizo fue entregar a la municipalidad un estudio estructural, debidamente avalado por el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos, tal como lo pedía el Ministerio. Junto con ese estudio, se entregó también un informe sobre el sistema eléctrico del estadio y un plan remedial para corregir los aspectos que la firma técnica identificó como necesarios.
Todos esos documentos fueron entregados al Ministerio de Salud por parte de la municipalidad, y el Ministerio los tiene desde hace más de 22 días. Son ellos quienes deben resolver ahora qué procede.
El estudio estructural indica que podemos tener una capacidad de 2.130 personas en el estadio. Entonces, uno pensaría que no habría problema para la apertura, pero eso depende del criterio final del Ministerio.
—¿Cuál sería la fecha límite para poder empezar a trabajar la logística y arrancar el torneo en el estadio Miguel Lito Pérez?
Vamos a ver. Nosotros obviamente estamos a la espera esta semana. De hecho, inscribimos el estadio como Lito Pérez ante la Unafut, y como sede alterna el Ernesto Rohrmoser. Entonces, vamos a esperar esta semana a ver de qué manera —ojalá— todo salga bien y podamos jugar ahí.
Y si no, pues también hay que valorar otra opción: jugar a puerta cerrada. Esa puede ser perfectamente una alternativa, considerando los costos. Hay que analizarlo muy bien, pero son cosas que obviamente debemos valorar.
—¿Económicamente sería más factible jugar a puerta cerrada en Puntarenas que con público en el Ernesto Rohrmoser?
Por eso, hay que medirlo. Obviamente, a nosotros nos importa mucho la familia porteña, pero también sabemos que no es tan fácil desplazarse a San José. Hay que pensar en comida, pasajes, entradas… son muchos factores que afectan. Y también hay que tener más consideración con la afición, que no tenga que gastar tanto para poder ver a su equipo, pudiendo hacerlo en el Lito.
Pero, además, si nos vamos a Rohrmoser, hay que hablar de transporte, alimentación, alquiler del estadio, traslado de vallas… muchos temas que se deben resolver a nivel logístico. Y eso significa un costo que, al final, hay que evaluar bien.
No tenemos garantía de que todos los aficionados se van a trasladar. Vea la semifinal: la cantidad de aficionados que llegó fue poca. Entonces, ahora que apenas estamos empezando el torneo, lo lógico es pensar que será aún menos. Y eso nos hace prever que los ingresos no van a ser tan altos como para cubrir los costos operativos.


