Por Juan José Herrera |20 de julio de 2021, 12:31 PM

La ausencia de la ministra de Educación Giselle Cruz a la audiencia pactada para este martes en el seno de la comisión que investiga los cuestionamientos en infraestructura educativa desató una airada ola de críticas entre los diputados y amenazas contra la jerarca y otras autoridades.

Cruz había sido llamada por los legisladores para responder por los cientos de centros educativos que hoy no pueden operar por tener una orden sanitaria; o bien, porque no han sido terminados pese al millonario fideicomiso que se firmó en 2015 con el Banco Nacional y que no arrojó los beneficios prometidos.

Sin embargo, en su lugar llegó a la comisión el viceministro Steven González, quien comunicó que la jerarca se encontraba de vacaciones y que él, como encargado del área de infraestructura del MEP, respondería a las consultas.

La situación provocó el disgusto generalizado de los diputados, que incluso cuestionaron si esas vacaciones fueron una decisión adrede para evitar la comparecencia.

La presidenta del órgano, la liberacionista Paola Valladares, fue más allá y amenazó con que no dudarían de llevar el caso al Ministerio Público dado que, asegura, se violentó el principio de legalidad.

“De esta comisión si alguien tiene que salir para el Ministerio Público lo vamos a sacar, pero es una jugadera a nivel de obra pública en este país como una piñata en turno y eso no se vale”, dijo.

La comisión se negó a recibir al viceministro y en su lugar acordó levantar la sesión y exigirle a la ministra “dar la cara” en una fecha posterior.

Valladares advirtió que para esa próxima audiencia ya Cruz no vendría sola, sino que se buscaría también que estuvieran representantes del Banco Nacional y también del Ministerio de Hacienda.

“No va a hacer una audiencia corriente, va a ser un careo y aquí cada uno va a tener que enfrentar si se ha violentado el principio de legalidad y se han escudado en excusas reiteradas”, añadió con enojo.

El también verdiblanco Luis Fernando Chacón calificó la actitud del MEP como una burla a los costarricenses y un relajo, e insistió por la presencia de Cruz ante la comisión para que le diga a ese órgano y a los costarricenses “qué es pasando”.

“Tienen que haber respuestas por un fideicomiso que desde el principio fue un desorden, es imposible planear algo que no existe”, aseguró.

Los legisladores aprobaron, en esa línea, una moción para que Hacienda y la Contraloría rindan declaración sobre los cuestionamientos en materia de infraestructura, lo mismo que otra para que el gerente de infraestructura de la CCSS se refiera a la construcción del nuevo hospital de Turrialba.