Por Juan José Herrera |18 de abril de 2024, 18:46 PM

Los diputados de oposición criticaron con dureza al presidente Rodrigo Chaves por sus palabras del martes anterior contra la Contraloría General y el trabajo de algunos legisladores.

Lo hicieron en medio de un debate reglado aprobado precisamente para que todas las fracciones tuvieran un espacio para referirse al que fue catalogado como un nuevo ataque del mandatario contra la institucionalidad y sus representantes.

Uno de los más ácidos en fustigar a Chaves fue el liberal Eli Feinzaig, que lo acusó de engañar al pueblo de Limón y “calentar a la gente” con “poses y bravuconadas”.

“Presidente, no engañe al pueblo de Limón con sus poses y bravuconadas, los limonenses no tienen un pelo de tontos, no les falte al respeto. Usted fue a decirles que no más promesas, que lo que quieren son obras, pero usted sabe que usted no puede asignar un proyecto de $854 millones a dedo, no puede y usted lo sabe, pero fue a Limón a calentar a la gente con un proyecto que como usted quiere no se puede hacer, pero sí se puede hacer cumpliendo con la ley, eso no es atravesar el caballo, es que hay un estado de derecho que se debe respetar”, afirmó.

Precisamente, el mandatario llegó al Caribe para hablar de “las trabas” que enfrenta esa provincia y cuestionar cómo, según él, la Contraloría hizo una “interpretación antojadiza” de la ley para impedir el desarrollo de la marina y terminal de cruceros de Limón, en referencia a la solicitud del ente contralor de apegarse al ordenamiento y licitar ese y cualquier otro proyecto.  

“El Presidente anda desbocado (…) Nadie quiere callarlo, Presidente, lo que le exigimos es que se comporte como un adulto”, añadió Feinzaig.

Junto a él, otros diputados de oposición criticaron al mandatario y le exigieron respeto para con las instituciones y los diputados.

“El discurso de odio y la deslegitimación de las instituciones por parte de cualquier líder, incluido el presidente de la República, es preocupante. En lugar de unir a la nación en torno a valores compartidos y el respeto mutuo, promueve la división y la desconfianza.

“En lugar de asumir responsabilidad y liderar con valentía y determinación, ha optado por una estrategia indignante: desviar la atención, lanzar ataques, sembrar el miedo y el odio y patear la bola de sus propias responsabilidades hacia otros. Basta ya de esta farsa, de amenazas y palabras vacías”, aseveró la liberacionista Kattia Rivera.

El oficialismo, por su parte, hizo un llamado a elevar la discusión y respetar “el estilo del Presidente”.

“Don Rodrigo ha sido enfático en que tiene un estilo de articulación diferente, y es de frente, incisivo y cuyo espíritu no es atacar la institucionalidad, es hacer que las cosas sean posibles. Y bueno, cada uno tendrá su estilo, este es el del señor Presidente, nos guste o no nos guste”, afirmó Ada Acuña.

La diputada insistió en que se debe dar “un salto cualitativo” en la calidad del trabajo que el Congreso ofrece y a trabajar todos en ese sentido, incluido el propio Chaves.

Pilar Cisneros, por su parte, se limitó a decir que el Gobierno respeta la ley, pero que no pueden respetar “una interpretación antojadiza de la ley”.


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