28 de mayo de 2014, 4:14 AM

Aunque todavía faltan más esfuerzos por parte de todos, cada vez más personas se preocupan por cuidar el medio ambiente y dejar de contaminarlo tanto.

Aprovechando esa conciencia social que se ha ido despertando poco a poco, el joven Oswaldo Prasca, decidió ofrecer una forma diferente de lavar su carro sin desperdiciar una gota de agua.

Para su proyecto de pruebas de grado desarrolló una idea de un negocio eco amigable, un lavado de carros en seco.

“Esta es una actividad que gasta mucha agua, entonces busqué la forma de modificar la actitividad”, explicó Prasca.

Él encontró métodos de lavado en seco que se utilizan en otros países e investigó qué se ofrecía.

Después de graduarse como ingeniero industrial comenzó a trabajar, pero siempre quedó en su mente la idea de ser su propio jefe, hasta que ese momento llegó hace unos meses.

Prasca habló con su esposa y decidieron desempolvar los documentos de ese proyecto y afinar los detalles.

Lo primero era sustituir el agua por algún producto y método que diera el mismo o mejor resultado.  Luego de mucha investigación y pruebas encontraron la fórmula. El producto protege la pintura y repele el polvo para distanciar el lavado.

El ingeniero construye su sueño con la mejor limpieza de vehículo, derribando prejuicios con trabajo.

En este bio lavacar, por cada lavada se ahorra entre 100 y 300 litros de agua, aproximadamente, y los productos que usa son biodegradables.