Por AFP Agencia |16 de noviembre de 2020, 7:39 AM

El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, dijo el lunes que está "muy muy confiado" en que habrá espectadores en los Juegos Olímpicos de Tokio del próximo año después de haber sido pospuestos por la pandemia de covid-19.

El aumento de las infecciones del coronavirus en buena parte del mundo y los nuevos confinamientos han vuelto a suscitar el interrogante de si se podrán celebrar los Juegos el próximo año si no se controla la pandemia en el primer semestre de 2021.

Tras reunirse en Tokio con el primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, Bach elogió las medidas que están preparando los organizadores y el gobierno contra el coronavirus. 

"Estamos creando una enorme caja de herramientas en la que pondremos todas las medidas que podamos imaginar", dijo el presidente del COI.

El próximo año "podremos tomar las herramientas adecuadas de esta caja y aplicarlas para garantizar un entorno seguro para todos los participantes en los Juegos", añadió.

"Esto nos deja muy confiados en que podremos tener espectadores en los estadios olímpicos el próximo año", afirmó.

Thomas Bach, que efectúa una visita de dos días a Tokio, afirmó también que el COI "hará grandes esfuerzos" para asegurarse de que lleguen a Japón vacunados tantos participantes y espectadores como sea posible, si hay una vacuna disponible para el próximo verano.

A continuación, en una conferencia de prensa, subrayó que no quería decir que la vacunación sería obligatoria.

"Queremos convencer al mayor número de participantes extranjeros de aceptar una vacuna", dijo Bach, añadiendo que el COI asumiría los gastos, sin ofrecer más precisiones.

"Final del túnel".

Con este viaje a Tokio, Bach espera convencer a los atletas, a la población japonesa y a los patrocinadores olímpicos de que efectivamente los juegos podrán celebrarse el próximo verano.

Los japoneses son escépticos y más del 60% de los patrocinadores del país todavía no han ampliado otro año sus contratos, aseguró la prensa local este fin de semana.

Thomas Bach afirmó a la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, que el COI se comprometió a garantizar un ambiente seguro, no solo para los participantes olímpicos "sino también para la población japonesa".

Koike ha visto en la visita de Bach "un aliento para la población japonesa, los habitantes de Tokio, los voluntarios, los niños y ante todo los atletas".

Las noticias esperanzadoras que llegaron la semana pasada sobre la fase final de una vacuna con una eficacia del 90% supuso un "alivio" para los responsables de Tokio 2020, que señalan que continuarán preparando los Juegos incluso sin vacuna, con medidas de prevención y de control.

El 8 de noviembre, la capital japonesa acogió su primer evento deportivo internacional desde que comenzó la crisis sanitaria: un torneo amistoso de gimnasia en el que participaron una treintena de atletas japoneses, estadounidenses, chinos y rusos, ante 2.000 espectadores.

Los organizadores del evento fijaron reglas muy estrictas para los deportistas llegados del extranjero, que tuvieron que aislarse antes de irse, someterse a test todos los días, y sus desplazamientos estuvieron limitados.

Los asistentes también debían respetar una serie de restricciones, como el uso de mascarilla, desinfección de manos, toma de temperatura o la prohibición de gritar para no esparcir gotículas.

El director general del comité de organización de Tokio 2020, Toshiro Muto, indicó la semana pasada que la próxima primavera boreal se decidirán el número de espectadores presentes en los Juegos el año que viene o las reglas para el público. 

Señaló, en especial, que la norma de mantener una cuarentena podría levantarse para los espectadores extranjeros.

El primer ministro japonés Suga quiso mostrarse optimista el lunes y reafirmó que los próximos Juegos serían una "prueba de que el ser humano ha vencido al virus".

"Juntos, podemos hacer de estos Juegos Olímpicos y de la llama olímpica la luz al final del túnel en el que nos encontramos todos con esta crisis del coronavirus", añadió Bach.