Gobierno brasileño gestionará estadios olímpicos de Rio tras fracaso de licitación
Los estadios del Parque Olímpico de Rio de Janeiro pasaron el viernes bajo gestión del gobierno federal brasileño
Río de Janeiro, Brasil | Los estadios del Parque Olímpico de Rio de Janeiro pasaron el viernes bajo gestión del gobierno federal brasileño y servirán para entrenamientos de selecciones y atletas de élite tras un infructuoso intento de licitación del espacio.
La decisión fue tomada de forma consensuada entre el gobierno de Michel Temer y la alcaldía de Rio, después de la cancelación la semana pasada del proceso de concesión para gestionar el Parque en una asociación público-privada. La puja tuvo un solo candidato, que no cumplía las condiciones.
El acuerdo, por un monto que hasta ahora no fue detallado, se formalizó antes de que el 1 de enero asuma el nuevo alcalde de Rio, el obispo evangélico Marcelo Crivella.
"Con el fin del gobierno, el sector privado no sabe si el próximo alcalde va a querer seguir con el proyecto", adujo el alcalde Eduardo Paes al formalizar el acuerdo de cesión junto al ministro de Deportes, Leonardo Picciani. Y "el momento económico de la crisis también influyó" en el fracaso de la licitación, agregó, en referencia a la recesión económica que golpea a Brasil.
Al inaugurar el llamado 'Muro de los campeones' del Parque, ubicado en Barra da Tijuca (zona oeste de Rio), Paes explicó que la alcaldía se quedará con la gestión de un estadio convertido ahora en un gimnasio experimental olímpico y también con las inmediaciones de los estadios, que espera que Crivella abra pronto al público como un parque recreativo.
La alcaldía construyó dos canchas deportivas y zonas de ocio, con mesas para jugar al ajedrez y aparatos de gimnasia, aunque el vasto y caluroso espacio apenas tiene árboles, bebederos o espacios de sombra.
De su lado, el gobierno federal asumirá la gestión de la cancha de tenis, el velódromo y de otros dos estadios olímpicos. También deberá demoler el estadio acuático y construir dos nuevos, la llamada 'Arena del Futuro', así como cuatro escuelas.
"Pretendemos dedicar este espacio al entrenamiento de las selecciones brasileñas, de los atletas de alto rendimiento, de las categorías de base y también a proyectos de inclusión social y de iniciación al deporte que nos permitan reclutar y descubrir nuevos talentos", anticipó Picciani.
Sin embargo, el ministro dijo que hasta dentro de 30 días no podrá detallar el coste estimado de esta gestión, que se contradice con los planes de austeridad impulsados por el presidente Temer para hacer frente a la recesión.