La Sele

Salvado el honor en Rusia, La Sele debe plantear la renovación

La Tricolor demostró que quizá no le daba para repetir la gesta de Brasil-2014, pero sí para haber peleado hasta el final por el boleto a los octavos de final.

Por AFP Agencia |27 de junio de 2018, 23:31 PM

Con un digno adiós a Rusia-2018, empatando contra Suiza 2-2 y jugando un buen partido, Costa Rica debe pensar ya en su futuro, que pasa por el relevo de la generación dorada del fútbol tico.

En Nizhni Nóvgorod, frente a una Suiza que buscaba su clasificación para octavos, el equipo dirigido por Óscar Ramírez demostró que quizá no le daba para repetir la gesta de Brasil-2014 (cuartofinalista), pero sí para haber peleado hasta el final por el boleto a los cruces y no haberse despedido de la lucha tras el segundo partido.

"El fútbol es así. Dejamos el listón muy alto en el Mundial pasado y la gente esperaba mucho de nosotros. Intentamos dar lo máximo y no se dio, pero podemos irnos con la cabeza levantada", resumió el delantero del Betis español Joel Campbell.

Ya contra Brasil, en el segundo juego del grupo E, Costa Rica había mostrado una mejor cara, pese a acabar perdiendo el encuentro por 2-0 con dos goles en el descuento.

Así, el gran 'error' de los Ticos estuvo en el primer juego, contra Serbia (a la postre el otro eliminado de la llave), no solo por el resultado (derrota por 2-1), sino por el juego extremadamente defensivo y sin profundidad en ataque.

La derrota contra Serbia fue clave

"Por primera vez en la Copa del Mundo los nacionales salieron a buscar el partido, a tratar de ganar, no quedarse con la mezquindad y el miedo que demostramos contra Serbia", destacó en su web el canal Teletica.

La televisora costarricense apuntó directamente a Ramírez como el responsable del "fracaso", ya que el miércoles dio entrada en el equipo inicial a Joel Campbell, Daniel Colindres y Kendall Watson, tres de los destacados ante Suiza y que apenas tuvieron protagonismo en los primeros dos juegos desde le banquillo.

"Lo que hice lo pensé siempre en el bienestar del equipo y son mis decisiones", declaró tras le partido el seleccionador Tico para defenderse de las críticas.

Pasada la página de Rusia, Costa Rica debe pensar en su futuro inmediato con la vista puesta en el Mundial de Catar-2022. Lo primero a resolver por parte de los dirigentes el fútbol Tico es la continuidad o no de Ramírez como seleccionador.

"No sé nada de mi futuro. Sólo que mañana (por este jueves) viajamos a Costa Rica", declaró en conferencia de prensa el técnico.

Una vez solucionado el tema del seleccionador, se deberá afrontar la renovación de la llamada generación dorada del fútbol costarricense. De los 23 convocados por Ramírez en Rusia, 12 ya habían competido en Brasil cuatro años antes a las órdenes del colombiano Jorge Luis Pinto.

Y muchos de ellos seguramente no llegarán a una próxima cita mundialista o, al menos, difícilmente llegarán en plenitud, comenzando por el capitán y director de juego Bryan Ruiz.

"No sé si me alcanzará para otro Mundial", comentó tras el juego frente a Suiza el jugador del Sporting de Lisboa, de 32 años (en agosto cumplirá 33).

La excepción de Keylor

Al igual que el capitán, otros piezas clave de la Sele en los últimos años superan la treintena, como Celso Borges (30), Jhonny Acosta (34), Daniel Colindres (33), Christian Bolaños (34), Giancarlo González (30), y varios oros están cerca de esa 'barrera', como Óscar Duarte y Johan Venegas (ambos 29), Christian Gamboa y Marcos Ureña (28). 

Con una base de jugadores jóvenes con experiencia en dos Mundiales, como Joel Campbell y Yelsin Tejeda, el próximo seleccionador tico debería ir dando paso a jugadores que participaron en los últimos Mundiales Sub-20 y Sub-17, con el defensa Ian Smith, presente en Rusia aunque sin debutar, y que formaba parte del equipo que alcanzó los cuartos de final del Mundial juvenil disputado en Chile-2015.

Caso aparte merece Keylor Navas. Forma parte de los treintañeros (31), pero por ser arquero y por el nivel de juego que ha demostrado en las últimas temporadas (tres Champions consecutivas con el Real Madrid) podría seguir siendo una pieza angular para la Sele.