Costa Rica está vinculada con gran caso de corrupción en España
Una sociedad anónima creada aquí fue utilizada para blanquear dinero de un expolítico del partido gobernante, indican los medios españoles.
Una pequeña casa en el barrio El Encanto de Calle Blancos, Goicoechea, es el domicilio legal de Sheraton Trading, sociedad anónima vinculada con uno de los mayores escándalos de corrupción descubiertos en España recientemente.
La sociedad Sheraton Trading es presidida por Bernal Zamora Arce, un mensajero de Pocora de 46 años, quien también preside la sociedad Droz & #38, que fue inscrita en el 2007 y que también aparece mencionada en este entramado, que involucra a un alto exmiembro del gobernante Partido Popular (PP).
De acuerdo con publicaciones de los diarios ibéricos El País, El Mundo y ABC, Sheraton Trading habría sido utilizada para lavar dinero por parte de Francisco Granados, exsenador y exsecretario general del PP en Madrid, y su socio, el constructor David Marjaliza.
Los diarios indican que mediante esta sociedad –inscrita en el Registro Mercantil de nuestro país el 9 de febrero del 2006– se abrieron cuentas en dos bancos suizos para depositar cerca de 4 millones de euros (unos 2.700 millones de colones al tipo de cambio actual), dinero que provendría del aparente cobro de comisiones ilegales por adjudicaciones de obras y contratos de suministros.
Una vez el dinero salía del país helvético –acotan los periódicos en sus sitios en Internet– pasaba por Costa Rica, luego por Singapur y terminaba repatriada en España.
Para blanquearlo en esa nación de cara al fisco, los dos cabecillas de la denominada Operación Púnica –que habría movido mucho más dinero– simularon compraventas de obras de arte que eran inexistentes, acota El País.
Este medio asegura que las operaciones las realizaba Marjaliza, pero consideran que Granados estaba al tanto: este último proporcionaba las influencias políticas para conseguir los contratos con el erario, mientras que Marjaliza se encargaba del modus operandi de la trama.
Precisamente fueron las autoridades judiciales suizas las que, a finales del año pasado, alertaron a sus pares españoles de la existencia en la banca de ese país de cuentas a nombre de Granados y Marjaliza –a nombre de las dos sociedades costarricenses– y de las extrañas transferencias de dinero que ambos realizaban entre ellos y nuestro país, asegura El País.
Fue en ese entonces cuando se activaron las alertas y tras meses de investigación, ambos fueron detenidos la semana pasada junto con 50 personas.
Granados –quien en abril del 2013 vino a Costa Rica por solo un día, confirmó Migración a Teletica.com– purga prisión en la cárcel de Estremera (en las afueras de la capital española) y que paradójicamente él inauguró en el 2008, en calidad de consejero de la Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid.
Durante las detenciones, la Guardia Civil decomisó dinero efectivo repartido en la casa y en el carro de Marjaliza: 50.000 en euros y 200.000 en dólares.
La Operación Púnica no ha acabado aún, según El País y El Mundo. Ahora viene el proceso para desentrañar la voluminosa documentación intervenida en las decenas de registros.
En los próximos días, agrega El País, saldrán a la luz nuevos municipios implicados y otros representantes públicos que también habría colaborado con el entramado ahora desarticulado.


