Por Yahaira Piña |14 de agosto de 2017, 3:28 AM
 

Hoy conocerá la historia de una mamá que perdió la vista desde que era niña pero eso no la limita para atender a su pequeña bebé y ser una mamá extraordinaria.

Más amor, cuidado y protección no puede tener la pequeña Ariel. Siempre está impecable y muy bien vestida.

La responsable de hacerla lucir así de impecable es su madre, una joven no vidente.

A pesar de su discapacidad, Martha es una mamá todo terreno. Atiende a su bebe de 8 meses, hace los quehaceres del hogar y cocina con su ingrediente favorito, el amor.

Hace año y medio su vida cambió al contraer matrimonio.

Hizo una pausa en la carrera universitaria para dedicarse al hogar.

Se siente afortunada por el hombre que ahora es su esposo y al igual que ella es no vidente.

Les ha tocado un difícil inicio pues el dinero no siempre alcanza, sin embargo pese a las limitaciones le sonríen a la vida y luchan por darle lo mejor a la pequeña Ariel.

Para esta mamá extraordinaria la maternidad es lo mejor que le pudo pasar. Se siente feliz porque aunque no pueda ver su hija con sus ojos físicos lo hace con los ojos del corazón.