Por Andrés Martínez |2 de mayo de 2016, 9:08 AM

Hace 20 años, Antonio Álvarez fue el último presidente del Congreso que dio luz verde la reforma fiscal que aumentó los impuestos.

“De seguido Álvarez puso a votación el proyecto. Con el aliento suspendido, Liberación Nacional lograba la mayoría necesaria un minuto antes de que se venciera el tiempo de reglamento”, indicaba el diario La Nación en su crónica del 1 de setiembre de 1995.

Con Antonio Álvarez como presidente del Congreso, se le daba luz verde a la última gran reforma de impuestos que tuvo el país.

Ahora, 20 años después con Álvarez de nuevo sentado en la presidencia la historia es otra.

El verdiblanco está casado con el freno de los impuestos. Aunque Solís quiera un aumento de la carga tributaria similar a la aprobada por la Asamblea que Álvarez Desanti encabezó.

Su agenda personal de diputado queda de lado durante este año: la eutanasia pasiva, FIV, cambio de nombre para transgéneros, no fueron parte de los acuerdos.

Lo que sí es un hecho, es que la presidencia del Congreso será su último puesto importante en la función pública.