26 de junio de 2013, 13:58 PM

Este miércoles, el Semanario Universidad, de la Universidad de Costa Rica, publicó una noticia en la que se detallan, con base en documentos oficiales y confidenciales, algunos de los gastos relacionados con el proyecto de la nueva refinería que se construiría en alianza con una empresa china.

Se trata de estados financieros de la Sociedad Reconstructora Chino Costarricense (SORESCO), nacida de la unión entre la Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) y la China National Petroleum Corporation (CNPC).

Estos, según detalla la nota del periodista del Semanario, Ernesto Rivera, fueron enviados por el ahora expresidente de RECOPE, Jorge Villalobos, junto con un correo electrónico dirigido a la defensora de los habitantes, Ofelia Taitelbaum.

Entre otras cosas, y según se desprende de la publicación, solo para el año 2012, SORESCO había presupuestado un total de $4,3 millones por concepto de salarios de personal técnico y administrativo.

Los documentos revelan que SORESCO gastó $1.021.000 para gastos de viajes, así como $1.066.000 para tres desgloses por concepto de reuniones y almuerzos de trabajo.

CNPC trajo a Costa Rica 26 ejecutivos desde China. Para ellos se destinaron en ese mismo año $1,4 millones para cubrir un bono extra a su salario. Tal como reza en las páginas del Semanario, “este “paquete de expatriación” lo recibe cada uno de los funcionarios chinos que trabajan en SORESCO, durante toda su estadía en Costa Rica”.

Empero, los beneficios para quienes vinieran desde ese país a trabajar en la nueva refinería no acaban ahí. Pues con parte de fondos públicos, a los 26 ejecutivos orientales se les cubrió un mes de vacaciones por cada tres laborados, “así como el pago de los tiquetes aéreos entre Costa Rica y China”.

El medio de la UCR señala que de acuerdo con cifras de la Contraloría General de la República, SORESCO gastó $503.462 en los viajes vacacionales, además de $27.183 por los tiquetes aéreos entre ambos países.

También, a estos empleados se les cubrió el alquiler de las casas en donde viven. La Contraloría puntualiza que SORESCO gastó $475.876 por estos rubros.

El costo de la remodelación de la refinería petrolera de Moín fue estimado en $1.500 millones, y para ello fue constituida la empresa conjunta, para la cual aportarían capital tanto RECOPE como CNPC.