Se cumplen 78 años del crimen del doctor Moreno Cañas

Este martes 23 de agosto se cumplen 78 años del crimen del doctor Moreno Cañas. Un paciente lo asesinó, pero la devoción por el médico milagroso sigue viva en miles de costarricenses.

Ese 23 de agosto de 1938 Flor era una niña, pero en ella sigue vivo el recuerdo de la noticia del crimen del doctor Moreno Cañas, muerte que conmocionó a todo el país.

¿Pero, cómo alguien acabó con la vida de un doctor tan bueno y tan querido?

Le decían el médico de los pobres. Ricardo Moreno Cañas estudió medicina en Suiza.

En los campos de batalla de la Primera Guerra Mundial operó a los soldados en medio de las trincheras.

De regreso a Costa Rica trabajó en el hospital San Juan de Dios en cirugía y ortopedia.

Es famoso por sus hazañas médicas, para algunas milagrosas. 

En 1934 le abrió el pecho a un paciente para extraerle una bala cerca del corazón. 

A otro le quebró un hueso y le enderezó su pierna.

Pero volvamos a su trágica e inesperada muerte: El responsable fue Beltrán Cortés, jornalero herediano a quien el doctor operó.

De niño Beltrán Cortés tuvo un accidente que le provocó una herida en su cabeza y en un brazo.

A sus 20 años, los doctores Moreno Cañas y Echandi Lahmann lo operaron varias veces, pero sin resultados positivos, pues tenía sífilis y otras complicaciones. Ante esto, Beltrán decidió vengarse.

La noche del 23 de agosto de 1938 fue a la casa del doctor Moreno Cañas cerca de la corte en San José.

La empleada doméstica le abrió y entró a la fuerza hasta la sala donde estaba el médico leyendo el periódico. Allí le disparó tres veces.

Luego de asesinar a Moreno Cañas, Cortés caminó hasta la casa del otro doctor que lo operó, Echandi Lahmann.

Estaba donde hoy es el hotel Don Carlos, a un costado del INS. Le disparó y acabó con su vida.

El asesino siguió corriendo y al pasar frente a la Alianza francesa mató a un canadiense.

Luego, cerca de la Marinita hirió a dos personas. Más tarde lo capturaron.

El mismo año del crimen, a Beltrán Cortés lo condenaron a cadena perpetua y lo enviaron a la isla San Lucas en Puntarenas.

Vivió en una celda de dos metros cuadrados donde quedó expuesto a los turistas.

Luego de 32 años tras las rejas quedó libre porque nuestro código penal se reformó y estableció una pena máxima de 30 años.

Sobre la muerte de Moreno Cañas también se ha dicho que  fue asesinado por un complot político.

Y es que fue diputado en dos ocasiones: en 1932 y en 1936.

En este último periodo se distinguió por sus ideas de izquierda y su oposición al presidente de entonces, León Cortés Castro.

Se rumoraba que sería candidato presidencial en 1940, pero la vida del doctor se apagó ese 23 de agosto de 1938.

Han pasado 78 años de su trágica muerte y la devoción por Moreno Cañas se mantiene.

El pueblo lo considera un santo.

Se dice que su espíritu ronda los pasillos del hospital San Juan de Dios para curar a los enfermos.

Hoy los devotos siguen comprando sus estampitas y su oración.

Además le rezan a lo que llaman "La medicinita" de Moreno Cañas, que es una velita y un vasito de agua.

Con la fe viva hacia el doctor, afirman que Moreno Cañas los sigue curando.

Así mantienen la devoción por el médico bueno y milagroso.