Por Juan José Herrera |3 de octubre de 2022, 12:29 PM

La costumbre de diferentes instituciones de confeccionar retratos como un homenaje a sus expresidentes le cuesta millones al Estado.

En lo que va de este 2022, el Poder Judicial pagó ₡4 millones por la pintura de Carlos Chinchilla, que ya hoy cuelga de las paredes de esa institución. Al mismo tiempo, ya tiene presupuestada una cifra idéntica para el retrato de Fernando Cruz, quien dejó la presidencia en julio anterior y cuyo homenaje se revelará el próximo año.

La Caja Costarricense de Seguro Social, por su parte, abrió recientemente una licitación para la confección de un retrato al óleo de su expresidente Román Macaya (2018-2022). Para ese fin, la Junta Directiva presupuestó, en agosto pasado, un monto máximo de ₡3 millones que podría aumentar en caso de ser necesario. Ese contrato no ha sido adjudicado.

Además, someterá próximamente a discusión el caso de Álvaro Ramos, quien estuvo al frente de la institución desde mayo pasado, pero fue destituido en setiembre por diferencias con el presidente de la República, Rodrigo Chaves, en relación con el aumento salarial aprobado en la Caja.

Según la costumbre institucional, Ramos también tendría derecho a ese retrato tras haber ocupado el cargo, pero esa decisión no está tomada.

“En el caso del doctor Álvaro Ramos, la eventual decisión de hacer un retrato correspondería a la Junta Directiva y, este momento, no se tiene un acuerdo sobre el particular”, dijo la oficina de prensa de la CCSS.

El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) es otra de las entidades que honra a sus exjerarcas con ese retrato. En su caso, ya tiene listo un presupuesto máximo para la pintura de Luis Antonio Sobrado, de ₡1.5 millones, que tampoco ha sido adjudicada.

“Como es usual en nuestra Institución, cuando la persona que ostenta la presidencia del Tribunal Supremo de Elecciones decida acogerse a su retiro o bien finalice su gestión como máximo jerarca, la organización, por haber ocupado dicho cargo, prevé la confección de un retrato como reconocimiento a su trayectoria y dirección.

“La administración tiene previsto la adquisición y confección de su retrato a través de un proceso de contratación idóneo para este caso y el cual aún no se ha iniciado, ya que nos encontramos en la etapa previa de elaboración de las condiciones cartelarias que reglamentarán la contratación directa concursada”, precisó Luis Guillermo Chinchilla, secretario general del TSE.

Las tres instituciones tienen en común que sus recursos provienen del presupuesto nacional, es decir, lo pagan todos los costarricenses.

La Asamblea Legislativa, que también rinde este homenaje, utiliza ahora la impresión de fotografías para sustituir las pinturas. Así se inauguró el retrato de la última presidenta de la pasada legislatura, Silvia Hernández.

En el caso de los retratos de los expresidentes de la República, la costumbre ahora es que cada uno de los líderes salientes confeccione sus propios retratos.