Perros de Traba: quebrada en Desamparados se convirtió en botadero a cielo abierto
El terreno es propiedad municipal, por lo que Rocky se fue directo hasta la oficina de la alcaldesa, Maureen Fallas.
Damas y caballeros amantes del ahorro, ya no hay que buscar más. En Perros de Traba les presentamos un lugar donde están tirando la casa por la ventana… literalmente.
Se trata de la quebrada El Padre, en Dos Cercas de Desamparados. Ahí puede encontrar todo tipo de artículos como televisores, sillones y colchones.
Si anda en busca de repuestos no lo piense más y venga de una vez, hallará las llantas y el bumper que tanto necesita. Lo mejor es que solo tiene que meterse a sacarlos; eso sí, bajo su propio riesgo.
Esta propiedad se convirtió en un botadero de basura donde cualquiera llega a dejar lo que se le antoja. Los vecinos ya ni siquiera recuerdan hace cuanto están viviendo así.
El terreno es propiedad municipal, por lo que Rocky se fue directo hasta la oficina de la alcaldesa, Maureen Fallas, quien de inmediato se comprometió con la comunidad y con Perros de Traba.
La funcionaria prometió limpiar el terreno en menos de 22 días, pero también le jaló las orejas a los vecinos que insisten en llenarlo de basura, y en eso la apoyamos completamente.
Ricardo Vasconcelo es un hombre que no encuentra consuelo. La rima es cruel pero es peor lo que le hicieron otros.
A él le deben un millón 114.000 colones. Hace once meses lo despidieron con responsabilidad patronal de la empresa Ibérico.
Cuando salió le prometieron sus prestaciones en un plazo no mayor a 30 días, sin embargo a estas alturas, no ve un centavo.
Rocky se enojó mucho y acudió a la empresa en busca de justicia para este trabajador. Se asustaron tanto que no quisieron hablar en cámaras, pero unas horas después Ricardo ya tenía el dinero que le correspondía.
Y cerramos con otra historia que se resolvió en un dos por tres gracias a los ladridos de Rocky. Un video lo colocó en nuestro Facebook Sandra Guillén.
Se trata de un tubo roto en Santa Bárbara de Heredia. La fuga tenía 22 días, y aunque los vecinos la reportaron, nadie deba señas de querer arreglarla. Perros de Traba tomó cartas en el asunto, y adivinen qué: la fuga ya no existe.


