19 de mayo de 2015, 1:23 AM

Con una cruda campaña, la policía de Lausana en Suiza busca que los peatones despeguen la vista del celular y pongan su atención por donde caminan.

Jonás, el personaje de la historia, muere atropellado por estar más interesado en su celular que en los carros. Y lamentablemente la situación se repite en nuestro país.

En febrero del 2012, un joven que iba escuchando música en la línea del tren en La Sabana perdió las piernas tras ser embestido por la locomotora.

Tan sólo una semana después la historia se repitió de la misma forma.

En Estados Unidos, por ejemplo, un hombre cayó a las vías del tren por no dejar de hablar por teléfono.

Y en China las distracciones son tan comunes que crearon una acera especial para aquellos que no pueden separarse ni un minuto de su celular.

Lo mejor es que aparte la vista de su teléfono y apague la música mientras camina, porque en el momento que menos lo espera la distracción puede jugarle una mala pasada.