18 de septiembre de 2014, 9:00 AM

El Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales de la Universidad de Costa Rica (Lanamme) había advertido hace un año de eventuales problemas en el kilómetro 18 de la ruta 27.

Las advertencias pasaron del papel a la realidad cuando ayer por la tarde dos caídas de agua obligaron a cerrar el paso por la vía.

La maquinaria de la concesionaria, Globalvia, tuvo que trabajar a fondo para volver a abrir el paso al tránsito en la zona.

Lanamme asegura que ellos están dispuestos a reunirse con la concesionaria y el MOPT, ya que no solo en ese lugar hay puntos de peligro en la ruta que lleva a Caldera.