2 de febrero de 2017, 1:06 AM

Desde un centro de monitoreo se controlan todas las cámaras.

86 están en La Reforma y 56 en la cárcel de menores Zurquí.

Hace un año este equipo se incorporó al trabajo de la Policía Penitenciaria y constantemente sirve para alertar a los oficiales de situaciones irregulares o peligrosas.

Pronto se sumarán 92 cámaras en la cárcel de Liberia.

En ellas se observa el movimiento en los reclusorios: requisas, revisión de encomiendas, entrega de alimentos y hasta traslados de privados de libertad.

En este caso se observa todo el camino de un reo hasta su celda de máxima seguridad.

Las cámaras cumplen una función en favor de la autoridad y los propios reclusos.

La embajada de Estados Unidos apoya económicamente el programa para colocar estas cámaras.

Se espera que durante el 2017 cinco cárceles más cuenten con ellas.