Por Juan José Herrera |23 de octubre de 2020, 17:52 PM

El Gobierno apostará al consenso de un grupo de 64 organizaciones para sacar adelante las propuestas que permitan combatir la crisis que enfrenta el país en el plano fiscal, económico y social.

La mesa multisectorial de este viernes precisamente buscaba llegar a una metodología que sentara las bases de este nuevo proceso de diálogo, que se extenderá hasta el 20 de noviembre próximo y que tendrá su primera sesión el próximo miércoles en el Estadio Nacional.

Al final, la posición que prevaleció fue la de discutir las propuestas como un pleno (entre todos los actores) y avalar aquellas que tengan el consenso de todas las partes, dejando de lado la propuesta inicial de que se impusiera la mayoría (votación).

La politóloga Ilka Treminio y el economista Víctor Umaña, coordinadores del proceso de diálogo, calificaron de “muy exitosa” la reunión de hoy, alegando no solo el acuerdo sobre la metodología sino también la recepción que mostraron los diferentes sectores a la invitación del Ejecutivo.

“Hoy lo que se discutió es la forma en que vamos a operar, los representantes se llevaron la propuesta de cómo va a funcionar este diálogo, algunos nos dijeron que debían consultar, pero lo importante es que todos reconocieron la importancia del diálogo y que nos vamos a encontrar el próximo miércoles”, dijo Umaña.

Igual de satisfechos se mostraron el presidente Carlos Alvarado y los ministros de Trabajo, Desarrollo Humano y Comunicación, todos parte de la discusión.

Ninguno ahondó, sin embargo, en los roces que los sectores sí denunciaron sobre una propuesta inicial de “submesas”, que amenazó con el retiro de diferentes participantes por la falta de claridad sobre su conformación y el proceso de acuerdos.

Forma y fondo

Geaninna Dinarte, ministra de Trabajo, explicó que si bien hoy la discusión se concentró en la forma, sí hubo observaciones sobre cuál será la agenda temática que se discutirá en este proceso de diálogo.

“La propuesta del Ejecutivo era buscar generar acuerdos tanto en materia de crecimiento económico como de empleo y por supuesto sostenibilidad de las fianzas públicas en un plazo corto y entendiendo que requerimos medidas en el marco de la pandemia.

“Sin embargo, numerosos actores evidenciaron su interés de que no fueran solo esos tres temas, y que uno de los aspectos que deberíamos incorporar es el componente social, no solo hablar de lo económico sino por ejemplo de cómo la pandemia ha incidido en la pobreza o la desigualdad”, dijo la ministra.

También se resaltó la necesidad de que la mayoría de fracciones políticas sean parte del diálogo, pues serán los diputados quienes terminen avalando o no los proyectos que salgan de este proceso.

A esta primera reunión se ausentaron prácticamente todas las bancadas con excepción representantes del PIN y PAC, así como el presidente del Congreso, Eduardo Cruickshank.

Liberación Nacional, la Unidad Social Cristiana, Restauración Nacional y el bloque Nueva República (independientes) insistieron en que la falta de claridad del Gobierno y su escasa acción para solucionar los temas a tratar eran razones para no asistir.

Las propuestas de la mesa de diálogo deberán llegar a la Asamblea Legislativa en los primeros días de diciembre, precisamente cuando el Ejecutivo tomará control de la agenda legislativa, por primera vez en la historia, por un periodo de 8 meses.