Por Bárbara Marín |22 de mayo de 2021, 9:48 AM

El pasado miércoles, durante la conferencia de prensa en Casa Presidencial, el ministro de Salud, Daniel Salas, reiteró que solicitar pruebas negativas de COVID-19 a las personas que ingresen al país no tiene lógica.

“En realidad, en estos momentos, poner una PCR, pensando en que tenemos el virus contenido y queremos protegernos, no tiene mayor sentido”, expresó Salas ante la pregunta de un periodista del diario La Extra.

Contrario a esa postura, dos expertos indicaron a Teletica.com que la prueba diagnóstica si tiene una cuota de peso en la realidad actual y podría ser una medida más para buscar por todos los medios que nuestros sistemas de salud no se vean mayormente saturados.

Fernando García, licenciado en Microbiología y Química Clínica de la Universidad de Costa Rica, reconoce que la medida ha contribuido a otros países para asegurar una menor carga en los sistemas de salud.

“En Estados Unidos y otros países se han asegurado con esta prueba de que las personas que ingresen al país no serán una fuente más de contagio”

García considera importante establecer un monitoreo de los distintos tipos de variantes que puedan ingresar al país, como, por ejemplo, la sudafricana, que, aunque ya se detectó en Costa Rica, esta representa una afectación notoria al sistema inmunológico.

Juan José Romero, epidemiólogo de la Universidad Nacional, considera que la decisión de las autoridades de salud va más por una línea comercial y diplomática, debido a que “un país no debería exigir que se cumplan ciertos estatutos, cuando él mismo no los puede cumplir”.

No obstante, en términos de salud es una medida “altamente deseable”, consideró.

Evitar a toda costa que ingresen nuevas variantes, como la india, es una medida que podría exigirse de manera preventiva y no hasta que se empiecen a presentar casos en el sector turismo.

El ministro Salas, aseguró que en el turismo no se han presentado mayores brotes de COVID-19.