Cuerpo de Bomberos enciende alertas: “En Costa Rica cualquiera puede ser electricista”
En construcciones o remodelaciones que cuenten con todos los permisos para llevarse a cabo, la parte eléctrica debe estar a cargo de un profesional colegiado.
Para el director del Cuerpo de Bomberos, en Costa Rica es fundamental regular con mayor precisión a las personas que ejecutan trabajos relacionados con las instalaciones eléctricas, a fin de evitar que las fallas en sistemas eléctricos sigan liderando la causa de los incendios estructurales en el país.
"Las personas que hacen esos trabajos no siempre son electricistas certificados. En Costa Rica, cualquier persona se puede autodenominar electricista y hacer trabajos", afirma Héctor Chaves.
El jerarca explica su posición, poniendo como ejemplo el tipo de instalaciones eléctricas que hay en las cuarterías y construcciones que se hacen sin los debidos permisos municipales, en las que no se cuenta con ningún plano certificado para desarrollar los trabajos.
"Por lo general, en estas estructuras hay un sistema eléctrico central y de ahí se derivan instalaciones improvisadas hacia los diferentes aposentos donde viven familias. Entonces, son sistemas improvisados, por lo general no hay una caja de breaker y no hay un diseño de ese sistema eléctrico. Entonces, lo que ocurre, generalmente, es que se empieza a sobrecargar", dice el jefe de Bomberos.
Las cifras de la unidad de Ingeniería de la institución revelan que, en los últimos 25 años, la principal causa de incendio en Costa Rica está relacionada con los fallos en los sistemas eléctricos y aparatos electrónicos.
Chaves explica que, en muchas ocasiones, las personas contratan a alguien que aprendió el oficio, pero no tiene formación o certificación alguna de que conoce realmente cómo realizar de manera segura su trabajo.
Desde la Oficina de Control de Instalaciones Eléctricas (Oficie) del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), la ingeniera Andrea Zúñiga explica que en nuestro país, en cualquier construcción o remodelación que cuente con todos los permisos para llevarse a cabo, la parte eléctrica debe estar a cargo de un profesional colegiado.
Además, la Ley Orgánica del CFIA establece que el ingeniero debe visitar la obra al menos una vez cada ocho días para verificar la calidad de los trabajos. Sin embargo, han constatado problemas en la ejecución de las labores por parte de los electricistas.
"En el 2024, realizamos 1.700 inspecciones [...] A veces, la calidad del material puede ser buena, pero la ejecución del trabajo fue mal hecha. Por eso tiene que haber un ingeniero presente para que corrija este tipo de cosas", comenta la ingeniera.
Zúñiga puso un ejemplo de cómo un electricista puede provocar daños en los materiales utilizados.
"Compramos el tubo para el sistema eléctrico. Lo compramos de calidad certificada, pero cuando llegamos a la instalación, resulta que el electricista para doblar el tubo le aplicó calor, pero ese calor fue excesivo. Ahí ya lo pasó por un proceso químico en el momento de la instalación. Si pasara algo con la instalación eléctrica, no sabemos cuánto va a resistir ese tubo", detalló.
La ingeniera explicó que el CFIA únicamente puede regular y supervisar a los ingenieros colegiados, por lo que no tiene ninguna autoridad sobre quienes ejercen el oficio de electricistas; pero recalca que la responsabilidad del ingeniero eléctrico es asegurarse, durante sus visitas, que quienes hacen el trabajo lo hacen bien y todo lo que ocurra con esa instalación, en última instancia, es su responsabilidad incluso hasta cinco años después de entregada la obra.
"Lo que sí hacemos nosotros, lo que sí nos compete, es capacitar a los ingenieros para que sepan identificar al personal de campo. Quién sí sabe y quién no sabe", aclara la especialista.


