¿Cómo operaba la estructura que enviaba cocaína a Europa en cargamentos de fruta?
La investigación contra el grupo incluyó el envío de una analista de la Policía de Control de Droga a España. Precisamente, en ese país fue detenido el sublíder de la organización desarticulada.
La estructura que ocultaba cocaína en contenedores de fruta para enviarla a Europa, utilizó 11 empresas agroexportadoras para lograr su cometido.
Así lo dio a conocer el ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora, durante una conferencia de prensa celebrada la mañana de este miércoles, en la que dio detalles sobre la investigación que por dos años llevó a cabo la Policía de Control de Drogas (PCD) contra la organización delictiva.
En su presentación, el jerarca destacó que el grupo alquilaba propiedades con plantas empacadoras para realizar las cargas (lo que se conoce como contaminación) de los contenedores que, posteriormente, eran enviados a los puertos de Limón, de donde zarpaban hacia el viejo continente.
De esa manera, la banda logró colocar al menos 3,5 toneladas de la droga en España, Alemania, Países Bajos, Portugal y Bélgica. Sin embargo, esa representa la cantidad decomisada por los cuerpos policiales internacionales; más no el total que se trasegó.
La Policía de Control de Drogas identificó un total de 29 contenedores contaminados asociados con esta organización.
Entre las formas de ocultamiento del estupefaciente, tanto el titular como el fiscal general, Carlo Díaz, indicaron que este se comprimía en láminas y se escondían en cajas de cartón, se introducían en estañones o empaques de piña, pulpa o malanga, se mezclaban con yuca o harina, se colocaban en tarimas o sistemas de refrigeración, al tiempo que se escondían entre bloques de chatarra.
"La estructura tiene una característica de las más difíciles de desarticulación: que operaban de manera horizontal, no de manera jerárquica.
"Esto habla de nuevas formas organizativas con que el crimen organizado se asocia para tener compartimentos estancos y que la información no pueda ser conocida de unos para con otros. Esto dificultó y fue un reto investigativo y refleja el nivel de capacidad técnica con que se encaró esta investigación", agregó Zamora.
Sin profundizar, el ministro aseguró que se hizo una búsqueda de las empacadoras que eran utilizadas a nivel nacional, al tiempo que se analizó la logística y coordinación de envíos entre los grupos que operaban en Costa Rica y Europa, así como sobre la comercialización de los productos.
También se determinó que 10 hombres y dos mujeres conformaban el grupo y se distribuían distintas labores. Sus identidades no han trascendido al cierre de esta publicación.
A todos se les detuvo la mañana de este miércoles en 20 allanamientos dirigidos por la Fiscalía Adjunta de Delincuencia Organizada (FAEDO) en Pital, Aguas Zarcas, Muelle, Boca de Arenal y La Fortuna de San Carlos, Ciruelas y El Roble de Alajuela, San Ramón, Mata Redonda de San José, Cartago, así como Limón.
Entre ellos, se logró la captura de un sujeto de apellido Paniagua, quien es señalado como el presunto cabecilla de la banda.
Colaboración internacional
Las 29 confiscaciones se llevaron a cabo entre 2022 y 2025.
El seguimiento a la organización inició tras el primer decomiso hecho en Bélgica, pero tomó fuerza de la mano de la Operación Soberanía, que corresponde a la puesta en funcionamiento de escáneres para la detección de drogas que adquirió la empresa APM Terminals para la Terminal de Contenedores de Moín, en Limón, pero que opera la Fuerza Pública.
Según Mario Zamora, la investigación tomó otra dimensión en el momento en el que se decidió enviar a España a una analista de la Policía de Control de Drogas. Esto porque con esa funcionaria se logró mejorar el intercambio de información sobre el tráfico internacional de sustancias ilícitas.
Valga mencionar que una mayoría de los decomisos hechos en Europa se dieron tras el inicio de la Operación Soberanía, el 13 de julio de 2023.
"Es importante que todas estas incautaciones la prensa costarricense, muchas veces, las informó e informó como casos en los que había logrado salir droga de Costa Rica y que nuestros sistemas no habían sido capaces de detectarlo. Por dicha, muchas de estas incautaciones, aunque mantuvimos silencios operativo o táctico en esas oportunidades, era parte del entramado que se estaba dando en términos operacionales para lograr dar con las partes que en Europa eran el entramado de esa organización", justificó el jerarca.
Pero el teniente de la Guardia Civil de España, David Velásquez, descartó que durante las pesquisas se haya hecho alguna “entrega controlada”. El funcionario extranjero sí destacó los reportes que hizo Costa Rica sobre contenedores que viajaban posiblemente contaminados, a los cuales se les dio seguimiento una vez que llegaron al Viejo Continente.
Fue de esa manera que se lograron las detenciones de 25 personas en España, Portugal y Alemania, mientras se compilaban datos para avanzar las investigaciones a nivel nacional, detalló Velásquez.
Cuando fue cuestionado entonces por los decomisos hechos en Europa y la promesa del presidente Rodrigo Chaves, de que del país no volvería a salir un gramo de droga con la puesta en funcionamiento de los escáneres, Zamora defendió que con el inicio de la Operación Soberanía ha habido reducciones de hasta 70% en los puertos de Amberes (Bélgica), Hamburgo (Alemania) y Róterdam (Países Bajos).
Zamora pidió tomar en cuenta que muchas de las incautaciones no venían de la Terminal de Contenedores de Moín, sino de otros, al tiempo que renovó su promesa de adquirir nuevos escáneres este año y tomar policialmente los puertos operados por la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) y la Sociedad Portuaria de Caldera (SPC).
De igual manera, subrayó que el “valor cualitativo” del caso “Embassy” destapado este miércoles fue la captura de los 12 miembros de la estructura criminal.
El ministro incluso reveló que la Policía de Control de Drogas tiene en curso otras investigaciones. De hecho, también advirtió a quienes se dediquen a este tipo de actividades que “es cuestión de tiempo” para que los detengan, por lo que los invitó a acercarse al Ministerio Público para confesar sus delitos a cambio de una pena atenuada.


