Celso Gamboa pide absolutoria: “Hubiera sido para algunos más conveniente que me sentenciaran para no ir a EE. UU.”
El exmagistrado hizo una declaración al final del juicio que enfrenta por presunto tráfico de influencias.
El exmagistrado Celso Gamboa pidió, la mañana de este lunes, ser absuelto en el juicio que afronta por presunto tráfico de influencias junto al exalcalde de San José, Johnny Araya, y la exfiscala Berenice Smith.
Lo anterior a pesar de que interpreta que, una eventual sentencia, hubiese sido más beneficiosa para ralentizar su extradición a Estados Unidos, donde se le requiere por aparente tráfico internacional de drogas.
“Hubiera sido para algunos más conveniente que me sentenciaran para no ir a Estados Unidos, pero no es lo que quiero. No quiero lástima, no quiero clemencia y no quiero aprovecharme de algún tipo de estrategia para retrasar lo que inminentemente se viene. Yo tengo que hacer frente a mi destino cuanto antes y resolver mis problemas cuanto antes”, aseguró Gamboa.
El también exministro de Seguridad Pública arremetió contra la Procuraduría General de la República (PGR), que el jueves anterior pidió que se le condenara, pese a que tan solo un día antes la Fiscalía Adjunta de Probidad, Transparencia y Anticorrupción (FAPTA) solicitó que se le absuelva por hechos ocurridos en 2016.
Particularmente, a Gamboa se le achaca haber ordenado —cuando era subjefe del Ministerio Público— que Araya desapareciera del expediente 12-000096-0621-PE, en el que había sido denunciado por aparente influencia contra la Hacienda Pública.
“Yo me pregunto entonces: ¿Qué será? ¿Qué hay gente en este país que no quiere que yo sea extraditado? ¿Que hay gente a la que no le conviene que yo me vaya de Costa Rica y enfrente los problemas que dicen que tengo en Estados Unidos? Bueno, yo ya no sé, porque estas causas, una tras otra, fueron fabricadas”, agregó en referencia a la solicitud de la Abogacía del Estado.
Desde el punto de vista de Gamboa, una potencial condena atrasará el proceso que debe afrontar producto de una investigación que le sigue la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de EE. UU. Pero del debate que inició el 22 de julio pasado, el abogado de profesión cree que no se logró probar que él incurriera en delito alguno.
No obstante lo anterior, el Tratado de Extradición con Estados Unidos establece tanto la entrega diferida del requerido (hasta que se cumpla una sentencia, por ejemplo), o bien, su entrega temporal (traslado al país requiriente, con el compromiso de una eventual devolución, en caso de que tenga algún asunto legal pendiente).


