Por Juan José Herrera |13 de agosto de 2021, 10:54 AM

El Sindicato Nacional de Enfermería, la Confederación de Trabajadores Rerum Novarum y la Asociación Nacional de Empleados Públicos reaccionaron con dureza a la reforma aprobada este jueves por la CCSS para el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).

Los cambios anunciados eliminan la pensión adelantada para los hombres y elevan a 63 años esa posibilidad para las mujeres; además, establecen que el cálculo de la pensión se hará ahora con base en los últimos 25 años de carrera y no de 20, como sucede en la actualidad.

Esos cambios empezarán a regir a finales de 2023 o inicios de 2024, según estimó la institución.

La queja de los sindicatos es que la Caja, según ellos, está trasladando a los trabajadores las malas decisiones que ha tomado durante años en el régimen y que hoy lo tienen al borde del colapso.

Pero, además, que los cambios aprobados tampoco solucionan los problemas sistemáticos que aquejan al principal fondo de pensiones del país.

“Veo esto como una bomba de tiempo porque sobre los hombros de los trabajadores no se les puede seguir endilgando la situación que atraviesa el país en cuanto al IVM y el déficit fiscal, es muy grosero lo planteado ayer por parte de la Junta Directiva de la CCSS que perjudica a toda la clase trabajadora adscrita a este régimen”, dijo Lenin Hernández, presidente de la CTRN y secretario general del SINAE.

Hernández aseguró que si bien había que tomar decisiones estas no podían ser tan “lesivas y groseras” para los trabajadores que han venido cotizado durante años.

“De la noche a la mañana les dicen que, en razón de los años para jubilarse, ahora las reglas cambian. La Junta Directiva no tuvo la consideración de plantear al menos un transitorio para que, de manera escalonada las personas se vayan retirando. Esto es muy grosero y lo más lesivo por parte de los representantes del Estado y Patronales, no pensaron en esa gradualidad”, sentenció el líder sindical.

Originalmente la Caja había anunciado que ese cambio sería gradual a partir de 2023 y hasta 2025, cuando entraría a regir.

La Superintendencia de Pensiones, sin embargo, ya había advertido que adelantar esa posibilidad le significaba al régimen un ahorro de ₡100 mil millones.

Más quejas

Para Albino Vargas y la ANEP, la decisión de imponerle estos cambios a los trabajadores “es una barbaridad” y una forma de desviar la atención sobre los ₡49 billones (millones de millones) que según ese sindicato se han perdido del IVM por desvíos.

“Esta es la verdad clase trabajadora, reaccionemos, movámonos, esto es posible pararlo”, dijo Vargas.

En la misma línea se pronunció el diputado independiente Jonathan Prendas, que asegura no hay nada que justifique eliminar la pensión adelantada.

“La decisión de la Junta Directiva de la CCSS solo obedece a una política de tapar sus errores administrativos, al tener las cuotas completas ya está cubierta la pensión.

“Una institución que tiene edificios vacíos, que compra parqueos como si fueran oficinas amuebladas, mascarillas a jardineros y chatarreros quiere cubrirlo con el sudor de los contribuyentes, eso no solo es una injusticia y una falta de respeto total”, aseguró.

"Reprocho las reformas al régimen del IVM, no solo por lo inoportuno del momento en que se acuerdan, sino porque, no resuelven los problemas estructurales del régimen", dijo a su vez el diputado de Restauración Nacional, Eduardo Cruickshank.

La CCSS aseguró que la reforma aprobada extenderá hasta 2050 la sostenibilidad del régimen; sin embargo, la SUPEN ya había externado que los cálculos de la institución no estaban contemplando el impacto del pandemia del COVID-19.