16 de abril de 2019, 6:40 AM

Por: Anyi Ospino

En la Biblioteca Nacional existe un departamento que le devuelve la vida a los textos que el descuido les ha causado estragos.

El tiempo parece no correr en el área de restauración y conservación; ahí es donde ocurre la magia.

En lo más profundo de la biblioteca cinco curadores se encargan de preservar los tesoros de este lugar. Pasión es lo que define el trabajo arduo que realizan a diario estos hombres.

Manchados, con acidez, y en ocasiones hechos trizas, es como se reciben los textos que llegan a este lugar.

Con pericia y mucha paciencia logran rescatar la historia encerrada en lo que otros podrían ver como basura.

Algunos de los textos que han logrado restaurar en este lugar datan del siglo 19. En Costa Rica no se cuenta con una carrera que profesionalice este oficio.

Este tipo de curación en el país se realiza de manera artesanal y con escasos recursos. El fin de recuperar estos textos son la preservación y compartir conocimiento.

Observe todos los detalles en el video adjunto.