Por Janeth Valverde |7 de diciembre de 2021, 6:00 AM

El sindicalista, Albino Vargas, llegó este lunes al I Circuito Judicial al juicio que se realiza en su contra por el delito de instigación pública, esto luego de que la Fiscalía lo acusara por, aparentemente, promover el cierre de fronteras y carreteras en el 2019. 

Después de que inició el proceso, el líder sindical pidió a la Sala Constitucional anular el debate, sin embargo, la jueza Lorena Blanco rechazó esta solicitud y el juicio continuó. La jueza reiteró en que los argumentos presentados por Vargas no tenían razón y por eso dio apertura al debate.

Este lunes por la tarde, la Fiscalía leyó la acusación contra Albino.

Esta detalló que en el 2019 el líder sindical llamó a los manifestantes a bloquear las carreteras, esto mientras se efectuaba un encuentro multisectorial que se daba en ese momento en la Conferencia Episcopal.

A raíz de esas acciones, la Procuraduría General de la República estimó un daño social de 1 millón de colones.

Varios abogados fueron los que presentaron las denuncias penales contra Vargas y las cuales mantienen hoy al sindicalista en la silla de los acusados.

El líder sindical decidió declarar en el debate y argumentó que los que lo acusan son enemigos ideológicos, además rechazó todos los cargos.

“Yo considero a los que me acusan enemigos ideológicos de esta visión de estado que yo sustento, y me llama la atención que, para esta circunstancia, la conjunción el calco de acusaciones entre el Ministerio Público, la Procuraduría General de la República, la cual responde directamente el presidente Carlos Alvarado y pues las acusaciones del movimiento de la señora Navas Montero”, digo el sindicalista.

Albino Vargas además afirmó que fue acusado por el presidente de la República, Carlos Alvarado, y que en todo momento han querido vincularlo como un terrorista.

“Rechazo categóricamente que aquí se me pretenda presentar casi que como un vulgar terrorista, casi que como un subvertidor del orden constitucional de la República. Señora juez cuando este cristiano que a usted le habla, me siento hijo de la Constitución de 1949 y de los valores que la misma representa”, agregó.

El delito de instigación pública, por el que se le acusó al sindicalista se castiga con seis meses y hasta cuatro años de prisión, según se desprende del código penal.

El debate contra el líder sindical está programado hasta el 10 de diciembre.

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