Por Juan José Herrera |11 de febrero de 2021, 10:54 AM

₡3.5 de cada litro de gasolina que paguen los consumidores se destinarán a pagar los beneficios que disfrutan los empleados de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).

Así está establecido en la nueva negociación de la convención colectiva de Recope, firmada ayer por la institución para su análisis por parte del Ministerio de Trabajo.

El presidente ejecutivo de la entidad, Alejandro Muñoz, celebró que en la nueva negociación esa cifra bajara casi ₡2 colones, pues en la actualidad ₡5.38 de cada litro de combustible se destinan a ese rubro.

Muñoz aseguró que eso significa un impacto actual de 0.9% en el precio de los hidrocarburos (0.7% en la nueva negociación), por lo que las críticas sobre el recargo son solo “un tema mediático y una idea equivocada”.

“Es un tema mediático, pero no por lo que afecta el precio de los combustibles, eso es una idea equivocada de los medios al creer que la convención colectiva tiene un gran impacto en el precio de los combustibles y eso no es cierto”, dijo el jerarca.

La convención negociada tendrá un costo proyectado de ₡46.119 millones, 34% menos que la última negociación que estuvo vigente desde 2017.

Eficaz y valiosa

Alejandro Muñoz defendió también la relevancia de mantener vigente a una refinadora que no refina, una discusión que como él mismo reconoció este miércoles no es nueva.

“Personalmente les puedo decir que Recope es un valiosísimo bien del Estado. Recope distribuye al país el 65% de toda la energía que requiere Costa Rica para su desarrollo y actividad económica, es decir que en términos de aporte energético al país, somos tres veces más grandes que el ICE con la décima parte de sus empleados”, aseguró.

Muñoz sí dijo reconocer que la institución “no es la más eficiente de las empresas”, pero afirmó que están trabajando en lograrlo.

“Recope es eficaz, lo ha sido toda su vida, porque nunca a los costarricenses les ha faltado combustible”, finalizó.

La negociación de su nueva convención colectiva, que estará vigente por los próximos tres años en caso de aprobarse, puso a la refinadora en el centro de la polémica debido a los beneficios y pluses que aboga mantener para la mayoría de su planilla, que ronda los 1.700 empleados.