2026 será último año con marchamo tradicional, promete INS
La institución prepara, para finales de este año, el refrendo del contrato con el consorcio conformado por la tica Central de Servicios PC S. A. y la mexicana Neology S. de R. L. de C. V.
Con el inicio del cobro del marchamo 2026, el Instituto Nacional de Seguros (INS) también pretende poner fin al tradicional cobro del derecho de circulación.
En los planes del instituto está acabar este año con el refrendo del contrato con la costarricense Central de Servicios PC S. A. y la mexicana Neology S. de R. L. de C. V. para la implementación del marchamo digital, un proyecto que lleva años en incubación y ahora se dice listo para entrar en operación.
“Este sería el último año con el marchamo tradicional, ya tenemos en el INS listo el refrendo interno entonces al finalizar este año ya estaría lista la licitación y para el otro año entraríamos con el marchamo digital para todos los vehículos con excepción de las motocicletas”, explicó esta semana la presidenta ejecutiva del INS, Gabriela Chacón.
Ese refrendo está cerca luego de que la Contraloría General rechazara, en setiembre pasado, las apelaciones presentadas a la licitación mayor del proyecto, dando así luz verde para que continuara el proceso.
Chacón explicó que, si bien para el 2026 los propietarios no notarán mayores cambios, esto será muy diferente en los años siguientes.
“El primer año no vamos a sentir ese cambio tan significativo porque vamos a tener que ir a las sucurales o recaudadores y vamos a tener que retirar y pegar el sticker como hasta ahora, pero el cambio va a venir en los siguientes, donde no vamos a tener que hacer todo ese proceso para pagar el derecho, esa será la gran facilidad”, añadió la jerarca.
El marchamo digital sustituirá el sticker actual por una etiqueta inteligente que tendrá un chip integrado con una información como la placa y el VIN de cada vehículo.
Esa etiqueta tendrá una vigencia de 10 años, por lo que los usuarios deberán realizar el pago anual, pero sin necesidad de cambiarla continuamente, como sucede en la actualidad.


