Por Glenda Solano |19 de febrero de 2023, 9:00 AM

Tras una espera de casi tres años, miles de metaleros se reunieron este sábado en Club Peppers para ver a Opeth, una de las bandas de metal progresivo más reconocidas y respetadas en el gremio musical.

La fecha inicial estaba pactada para el 3 de mayo de 2020, pero la pandemia no permitió que el evento se desarrollara, tuvo que posponerse. 

La incertidumbre imperó por años para muchos que habían comprado su entrada y no sabían si podrían ver a los suecos, hasta que el pasado 7 de octubre recibieron la noticia por parte de la productora Blackline, de que el concierto por fin se realizaría este 18 de febrero.   

Llegada la fecha, bastantes fanáticos se alistaron desde buena mañana para disfrutar de sus ídolos en Zapote, empezaron a llegar al recinto pasado el mediodía, aunque el ‘chivo’ iniciaría hasta las 7:30 p. m. con la presentación de Persefone, invitado especial para esta ocasión.

El reloj seguía su curso cuando a las 3:55 p. m., la banda sueca llegó en una buseta saludando a los presentes, previo a efectuar las pruebas de sonido correspondientes.


Kevin Cambronero fue uno de los seguidores que llegó de primero para ver a su grupo favorito.

“Es la segunda vez que los veo, pero ya pasaron más de cinco años desde su último concierto en el país, por lo que se siente emocionante como si fuera la primera vez. Y escucharlos desde afuera, probando el sonido, hace crecer aún más la emoción”, comentó Cambronero.

La larga fila para el concierto, que estaba completamente vendido y contaría con alrededor de 2.000 personas, sumado a un ambiente efusivo, daban la bienvenida a lo que sería una noche inolvidable para aquellos que aprecian el buen metal.

A las 6 p. m. por fin se abrieron las puertas, dando pasó a la presentación con la agrupación andorrana Persefone, que comenzaría a las 7:21 p. m. 

Con cinco álbumes de estudio incluido Metanoia (lanzado en 2022), Toni Mestre, Carlos Lozano, Miguel Espinosa, Marc Martins, Sergi Verdeguer y Filipe Baldaia inyectaron buena dosis de death metal progresivo a los asistentes durante casi una hora.

Las luces se apagaron nuevamente y la euforia se desbordó en el lugar con silbidos, cánticos, palmas y más. Al ser las 8:38 p. m. se empezó a escuchar “chivo, chivo” pues la espera se hacía eterna. 

Luego de casi media hora, cuando el reloj marcaba las 8:45 p. m., Opeth (banda formada en 1990), salía al escenario para interpretar sus mejores piezas y por supuesto también aquellas de su más reciente material, In Cauda Venenum, publicado en 2019 y con el cual realizan su gira por Latinoamérica.

Mikael Åkerfeldt, miembro fundador, mostró su aprecio durante todo el espectáculo por el recibimiento que siempre les brindan en Costa Rica e incluso se puso un chonete como símbolo de agradecimiento.

Hubo un momento al inicio de la presentación en la que los seguidores empezaron a corear “Miguelito, Miguelito” a lo que él respondió. 

“Miguelito, ese soy yo, muchas gracias… Miguelito en la casa”, dijo el vocalista y guitarrista líder de la banda. 

Luego de casi dos horas y media en las que interpretaron 13 canciones, entre las que destacan Demon of the FallEternal Rains Will Come, Under the Weeping Moon, Burden y The Moor, la banda se despedía al ser las 11:12 p. m.  


"Costa Rica tuvimos una maravillosa, maravillosa noche... los amamos", enfatizó Åkerfeldt. 

El quinteto compuesto por Mikael Åkerfeldt, Fredrik Åkesson, Martín Méndez, Waltteri Väyrynen y Joakim Svalberg cuenta con 13 álbumes de estudio, tres box sets, y cuatro álbumes en vivo y se ha presentado tres veces en suelo tico, anteriormente visitaron el país en 2015 y 2017.