Madre de seleccionado nacional vendía tortillas para comprarle tacos de fútbol

Marta Castro cuenta cómo, siendo una mamá soltera, pudo sacar adelante a sus tres hijos, el menor de ellos es Carlos Martínez, seleccionado nacional. Ella caminaba, diariamente, las calles del centro de Santa Ana para impulsar los sueños de los pequeños.

En el segmento “+Q un seleccionado” le mostraremos las historias de algunos jugadores de la Selección Nacional de Costa Rica, contadas desde la óptica de sus seres queridos. En esta primera entrega hablamos con los allegados de Martínez, de 23 años, quien, el 18 de marzo de 2022, recibió la primera convocatoria de Luis Fernando Suárez.

De acuerdo con Marvin Martínez, hermano mayor del futbolista, desde los seis años “Cali”, como le llaman de cariño, mostró talento para el fútbol. Gracias a una beca, se incorporó a la Academia Furati, donde pulió su talento en este deporte hasta los 16 años, cuando fue seleccionado por Aspire Academy y logró viajar a Senegal. En 2017, fue contratado por K.A.S. Eupen de Bélgica.

En 2019 volvió a Costa Rica y jugó con el Herediano, luego pasó a Guadalupe F.C. y, actualmente, es una ficha de San Carlos.

De acuerdo con Pedro Sibaja, profesor de Educación Física en el Colegio de Santa Ana, Carlos era muy respetado por los estudiantes del centro educativo, pues siempre los llevaba a las finales de los torneos estudiantiles; incluso, en la actualidad, es un ejemplo para los alumnos.

Samuel Campos, el mejor amigo de “Cali”, afirma que el joven de padres nicaragüenses representa a todo el cantón de Santa Ana cada vez que pone un pie en una cancha. Aún recuerda las “mejengas” que disfrutaban de niños y cómo Martínez resaltaba entre todos los vecinos del barrio El Invu.

Todavía se desconoce si él será convocado por Suárez para el Mundial Qatar 2022; sin embargo, sí formó parte de los jugadores que hicieron posible que Costa Rica asistiera a la próxima Copa del Mundo y, de ahí, la intención de mostrarlo en este reportaje.