Por Juan Carlos Zumbado |18 de noviembre de 2022, 18:55 PM

Hace tres años, Bernardo Víquez, dueño de este proyecto turístico, empezó a convertir su finca productora de fresas en el Laberinto Olivo, una transformación que culminó hace tres meses con la apertura del lugar al público.

Usó la planta olivo para crear los senderos, de ahí el nombre del sitio; también utilizó amapola y pingo oro. El laberinto tiene una extensión de 2.500 metros lineales y, en promedio, se tardan unos 45 minutos en recorrerlo.

Abre todos los días de 9 a. m. a 5 p. m. Los fines de semana tienen ventas de comida rápida por parte de un emprendimiento gastronómico, propiedad de las hijas de Víquez. Además, hay un estanque con patos y una granja para el disfrute de los turistas, así como un amplio parqueo.

Se pueden llevar animales a este lugar ubicado en Poasito de Alajuela. Los adultos pagan 3.000 colones, mientras que los niños mayores de seis años pagan 2.500. Menores de seis años entran gratis. Aparecen en Waze y en redes sociales como 'Laberinto Olivo'. Teléfono: 6163-9178.