Por Luanna Orjuela Murcia |10 de abril de 2021, 8:00 AM

Tal vez usted no le preste mucha atención a las heces de sus mascotas, pero son muy importantes: a través de estas podemos conocer el estado de salud de un animal.​

Gracias a la información proporcionada por AMO Bienestar Animal, le explicamos cómo clasificar las heces de su mascota.

Primero es importante saber que el popó normal y saludable de una mascota (perro o gato) debería de ser café y parecer un tronquito. La consistencia debe de ser firme, pero no dura.

“Deberías poder recogerla con una pala o la bolsita, sin que quede untada en ningún lado. Por supuesto, heces espesas, pastosas o líquidas deben alarmarte”, escribió la organización en su cuenta de Instagram @amo.probienestaranimal.

El olor debería de ser tolerable, el color debe de ser café, sin presencia de manchas o colores anormales.

“Es importante que tu animal haga sus necesidades fácilmente, sin dificultades y en cuestión de segundos. Prestá atención a gemidos, lamidos excesivos o una posición que se mantenga por minutos sin tener éxito”, indicaron.

Es relevante que el excremento luzca similar todo el tiempo. Si hay un cambio repentino, lo recomendable es consultarlo con el veterinario.

Otros tipos

Esté muy atento si su mascota hace popó verde, significa que ha consumido muchos vegetales, hierbas o que tiene un problema en la vesícula biliar.

Si la deposición es naranja o amarilla, se debe a un problema del hígado o excesiva bilirrubina.

Si tiene sangre es debido a una hemorragia en los tramos intestinales, además un posible tumor o úlcera.

Color negro significa que tiene sangre vieja, puede ser por una lesión en el tracto digestivo o incluso cáncer.

Si es gris se debe a una obstrucción biliar, insuficiencia pancreática o exceso de grasa en la alimentación.

Heces con manchas blancas, tipo granos de arroz, quiere decir una infestación de parásitos.

Si es blanca puede ser por ausencia de pigmentos, infección bacteriana o comida con exceso de calcio.

Diarrea se debe a cambios en la alimentación del animal, alimentación inadecuada o presencia de un parásito intestinal.

Si las heces presentan mucosidad, se debe a un posible parvovirus, parásitos o irritación por nueva dieta.

Ante cualquier irregularidad de heces es recomendable llevar a su mascota al veterinario.