La jugada de Johan Venegas que cambió el partido

De nada sirvieron los 16 goles que registra Johan Venegas en el campeonato y que le permitieron ser goleador del Clausura 2023.

Todo eso no sirve de nada si al momento de la verdad se falla.

Corría el minuto 16 del partido, Carlos Mora sacó una gran acción individual como lo tiene acostumbrado y sirvió a Venegas que eludió la salida rápida de Kevin Chamorro, el arco quedó libre y se acomodó y… su remate fuera. Increíble, más difícil fallarlo, pero el delantero lo erró.

Hasta ese momento la Liga dominaba el cotejo, llegaba al estadio tibaseño con un gol de ventaja y se veía firme, incluso era mejor en la cancha.

Pero esa acción cambió todo. La Liga se cayó, mientras que Saprissa encontró el combustible en la locura de su afición.

Cuatro minutos después, Warren Madrigal, el que paradójicamente había dejado en la grada Vladimir Quesada, mandó a guardar el 1-0 a favor de Saprissa. Ahí se acaba la ventaja y mucha de la ilusión manuda.

El segundo fue cuestión de tiempo, es más, se saldó en unos seis minutos que fueron fatídicos para los rojinegros que se descontrolaron, que revivieron fantasmas para quedarse como congelados.

Javon East marcó el 2-0 al 26’ y se desató una explosión de éxtasis en un estadio que siempre creyó en su equipo.

Con el segundo gol, Venegas intentó reunir al equipo y se marchó al banquillo, pero poco podía borrar el error que costaba un título.

El dardo definitivo llegaría justo al final del primer tiempo. Otra jugada de Madrigal que se metió al área, sacó un remate rastrero para que el cubano Paradela anotara el tercer tanto y la fiesta.

Los manudos se marcharon cabizbajos, justo en medio de una fiesta morada de la que ya no eran partícipes. Casi que una sentencia de muerte.

El goleador no solo no apareció en la gran final, sino que también no estuvo presente en ningún partido de la fase final con sus goles.

Para la complementaria, Venegas no volvió a tener chance de brillar y prácticamente paso desapercibido. Es más, cuando hubo un penal a favor de los erizos, pateó Celso, no el goleador.

Sin duda una jugada que difícilmente vayan a olvidar los rojinegros, pues bien pudo dar ese esperado título 31, y mucho menos el propio Venegas.