Estos fueron los pilares del bicampeonato rojinegro en Centroamérica
Los dirigidos por Alexandre Guimaraes volvieron a derrotar al Estelí en la final.
Alajuelense vuelve a sonreír por todo lo alto.
Por segundo año consecutivo consiguieron dejarse la Copa Centroamericana en un histórico bicampeonato y tras dos años llenos de éxito, pues no saben lo que es una derrota en este nuevo formato.
El nuevo cetro rojinegro, que deja más que claro quién manda en Centroamérica sin ninguna discusión, tuvo a varios pilares a lo largo del certamen.
Estos fueron:
Leonel Moreira: El guardameta fue una garantía en la defensa para la Liga y es inamovible en su puesto. El portero fue vital con sus enormes salvadas y sumó así su tercer título del área con los rojinegros y el cuarto personal. Ha disputado 10 partidos en el torneo y dos porterías a cero.
“Es un aliciente a la motivación. Yo lo veo así, nos puede llenar de confianza y tampoco tiene que ser un factor principal que nos dicte el partido del sábado de semifinal”, mencionó el portero.
Alexis Gamboa: Fue el pilar de la defensa. Puede hacer buena dupla ya sea con Manjrekar James o el mismo Santiago Van der Putten. Sus excelentes cortes y seguridad en el juego aéreo lo hicieron clave.
Celso Borges: Marcó el gol de penal en el partido ida frente a Real Estelí en Nicaragua. Es el líder y capitán del equipo y su actual temporada ha demostrado mucha madurez en su juego. Fue el futbolista del campeón que disputó más partidos de Copa Centroamericana (19). La bujía y director de orquesta de su padre, el técnico Guimaraes.
Anderson Canhoto: El brasileño arribó a Alajuelense con un perfil bajo y rápido se ganó el cariño de la afición con su esfuerzo y gran dinámica. Canhoto se ha consolidado como el extranjero más regular en la actual campaña y ayudó a encaminar el bicampeonato rojinegro. Ha sido, de momento, uno de los mejores fichajes en el fútbol nacional en este semestre.
Diego Campos: El goleador del certamen. Su semestre ha sido de ensueño y supo esperar con paciencia su oportunidad tras un primer torneo de adaptación. Marcó seis tantos y se dejó la bota de oro.
Alexandre Guimaraes (técnico): El artífice del título. Se encargó de ensamblar todas las piezas y darle continuidad a los jugadores sustitutos para generar una buena rotación entre los titulares y suplentes, haciendo que cada futbolista aporte bastante en los minutos en cancha. Cierra un torneo redondo, invicto y arriba en prácticamente todas las estadísticas, goleo y anotaciones en contra.