Por José Fernando Araya |21 de diciembre de 2021, 11:20 AM

El diario parisino L’Equipe destapó este martes una serie de tensiones que vive el camerino del París Saint Germain, considerado por muchos el club más fuerte del mundo, pero con un ambiente que dista de ser el mejor.

Incluso, las publicaciones del rotativo galo involucran el candente duelo en la portería que vive el tico Keylor Navas y el italiano Gianluigi Donnarumma.

Según la publicación, los roces que vive el equipo comienzan con la portería, pues Mauricio Pochettino se mostró contento con la labor de Navas y nunca pidió la llegada del italiano, lo que generó más bien un problema.

Eso sí, el medio francés afirma que Navas aceptó el reto de pelear por la titularidad de forma deportiva y ambos decidieron firmar un pacto para competir.

Sin embargo, el agente de Donnarumma, Mino Raiola, aseveró que “todo se decidirá a favor” del italiano, lo que volvió a poner tensas las cosas.

Además, describe un hecho en particular que ocurrió en el vestuario tras el duelo ante el Niza, cuando el segundo portero de ese equipo Marcin Bulka (cedido por el PSG) se acercó a Keylor.

“Bulka nabla con Navas y se da cuenta de que tiene el mismo proveedor de guantes que él, la marca inglesa Sells. Un testigo relata lo siguiente: “Navas miró a Donnarumma, que no estaba lejos, y respondió a Bulka: 'Mira, estos guantes los usan los mejores porteros del mundo'. El italiano, que usa Adidas, se sintió aludido", menciona L’Equipe.

De momento el italiano cierra el año ganándole el pulso a Navas, pues ha sido titular en los últimos partidos y el tico solo apareció el domingo en la Copa de Francia.

Camerino dividido.

Sin embargo, esto es un detalle menor con respecto a las otras revelaciones que hace L’Equipe.

La publicación habla que existen dos bandos completamente claros, los sudamericanos y allegados, por un lado, y por el otro, los franceses. Esto podría abrir la puerta a una posible salida de Mbappé quien no estaría muy a gusto en el plantel y podría valorar las jugosas ofertas que le llegan.

Otro aspecto que se revela es lo poco cómodo que se está sintiendo el brasileño Neymar, ante el hecho de compartir el protagonismo con Messi y Mbappé.

El brasileño estuvo cerca de recibir una fuerte sanción tras un plantón en una actividad comercial que no cayó bien en la directiva.

Fue el director deportivo, Leonardo, quien decidió no aplicarle un castigo por temor a una filtración a la prensa y que el escándalo fuera mayor.

El motivo de su retraso es que Neymar no sabía si debía o no hacer un test de COVID por la mañana y estaba enfadado por ello.

Otro problema que se destapa es que en uno de los últimos entrenamientos matutinos del equipo, dos jugadores sudamericanos se negaron a entrenar porque estaban visiblemente cansados tras pasar la noche de fiesta.

También la celebración del sétimo Balón de Oro a Messi no cayó muy bien a sus compañeros, ya que el astro argentino y su colega Leandro Paredes sufrieron al día siguiente “síntomas de gastroenteritis” y no entrenaron con el resto de la plantilla que también estuvo en el festejo. Muchos reclaman más mano dura por parte de Pochettino.

Finalmente, otro roce que vive el club a lo interno fue el permiso para que Mauro Icardi arreglara su situación con Wanda Nara.

El argentino pidió tres días libres para intentar reconquistar a su esposa e incluso se escapó a Milán para su reconciliación, esto no cayó nada bien a lo interno.

Pese a las revelaciones de fuentes internas y anónimas, el club parece quebrado por dentro, sin embargo, los resultados están saliendo y mantienen su paso por la Champions League y el liderato del fútbol francés.

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