Así viven los seleccionados una concentración diferente a las demás

La gran cantidad de contagios que sufre el país producto de la variante Ómicron, obligó a la Federación Costarricense de Fútbol a hacer una concentración cerrada previo a los juegos contra Panamá, México y Jamaica.

Normalmente, los jugadores después de entrenar pueden regresar a sus casas o en ocasiones se les brinda tiempo libre para compartir con sus familias. Sin embargo, en esta ocasión se adoptó una concentración en “burbuja” con el objetivo de reducir el riesgo de contagio.

​Incluso, los futbolistas se someten constantemente a pruebas de antígenos para evitar algún brote dentro de la Tricolor.

“Ha sido anormal por el momento que está viviendo el país, lo mejor es cerrarla. En una semana tan clave, fue lo mejor que pudimos hacer. El grupo está unido y contento. Nos ha ayudado a conocernos unos a otros, nos hemos unido y hablando en todo momento que lo que se viene es importante”, dijo Yeltsin Tejeda en zona mixta ante lo medios de comunicación.

Kendall Waston afirmó que la concentración permite trabajar y a la vez mejorar la convivencia del grupo. Los torneos de Play Station y hasta partidas de pool, sacan a los seleccionados de la rutina.

“Es parte del sacrificio y bendición de disfrutar esta eliminatoria porque sabemos la importancia de lo que nos jugamos. Pero con tanto entrenamiento hay tiempo libre donde podemos hablar, conversar pero distraernos un poco para no ‘embotarnos’”, manifestó Kendall Waston.

"Soy malísimo en el pool", bromeó el zaguero.

La Tricolor estará enfrentando a Panamá este jueves, en un encuentro vital para seguir con vida en la Eliminatoria de Concacaf.