Vuelos que desaparecieron misteriosamente a lo largo de la historia
El mundo entero busca por mar, cielo y tierra el avión de Malasya Airlines que desapareció desde la semana anterior con 239 pasajeros.
Mientras el mundo entero busca por mar, cielo y tierra el avión de Malasya Airlines que desapareció desde la semana anterior con 239 pasajeros, existe una larga lista de vuelos que todavía siguen desaparecidos y otros que meses o años después fueron hallados.
En el año 2009, un vuelo que salió de Rio de Janeiro con destino a París, cayó en el Océano Atlántico con 228 pasajeros. El Airbus A330 del vuelo 447 de la aerolínea Air France, fue encontrado cinco días después, todos sus pasajeros murieron y todavía siguen desaparecidos 74 cuerpos.
Fue hasta tres años después, que los investigadores descubrieron qué fue lo que provocó el accidente: cristales de hielo hicieron que el piloto automático se desconectara.
El vuelo 571 de la Fuerza Aérea de Uruguay, que se dirigía a Santiago de Chile, desapareció en 1972 en Los Andes por culpa del clima, con más de 45 personas a bordo. Dos meses más tarde, tras intensas búsquedas, fueron encontradas 16 personas, quienes sobrevivieron dentro de los escombros del avión comiendo pasajeros fallecidos.
Otro de los aviones desaparecidos, fue uno militar en 1962 que salió de una isla del Pacífico Occidental con 90 pasajeros a bordo, se dirigía a Filipinas pero que nunca llegó. En este suceso más de 1300 militares realizaron una intensa búsqueda, sin embargo, nunca se supo qué fue lo que pasó.
El famoso Triangulo de la Bermudas que lo conforman Florida (EE.UU), Puerto Rico y Bermuda, también registra varios vuelos perdidos. Dos jets de British South American Airways, desaparecieron en la región entre 1948 y 1949, con un total de 51 personas.
Para el año de 1947, un vuelo de British South American Airways desapareció de Los Andes cuando viajaba con 11 personas a bordo, fue hasta 50 años después, en 1998, que un grupo de escaladores encontraron un motor de avión y más tarde restos humanos. Todo apunta a que cuando el avión cayó provocó una avalancha y quedó enterrado en la nieve.
Por último, en 1937, la piloto Amelia Earhart, desapareció junto con su monoavión de dos motores en el Océano Pacífico, cuando trataba de dar la vuelta al mundo, nunca se encontraron rastros del avión por lo que fue declarada fallecida oficialmente en el año 1939.