Por Eric Corrales |16 de abril de 2021, 17:40 PM

Una trabajadora del Gobierno de China reaccionó furiosa luego de que, al parecer, su jefe la comenzara a acosar.

El hecho ocurrió en el noreste del país asiático y generó todo un debate sobre la persistencia del acoso laboral. Además, el video se convirtió en una sensación en Internet, al viralizarse por todas las redes sociales.

Según informaron medios como The New York Times, todo comenzó luego de que la mujer al parecer recibiera mensajes de acoso de su jefe, por lo que decidió encararlo, tomó el palo piso y eufórica lo golpeó mientras le recriminaba su mala conducta.

En el video de 14 minutos se aprecia a la mujer de apellido Wang lanzando también libros a la cara de su jefe, mientras este esconde su rostro entre los dedos y le dice que solo estaba bromeando en los mensajes.

Los medios locales mencionaron que la mujer presentó una denuncia policial contra su jefe.

Lu Pin, una destacad activista feminista china, asegura que: “muchas personas vieron el video como una salida para la ira reprimida por la ausencia general de responsabilidad de los acosadores y de pocos recursos disponibles de los tribunales o la policía. Muchas víctimas se sienten impotentes para denunciar, les preocupa que no se les crea o que lleguen a tomar represalias en su contra”, según relató The New York Times.

El hombre es el subdirector de una agencia del Gobierno de alivio de la pobreza en el distrito Beiin de Suihua, una ciudad en la provincia de Heilongjiang.

El hombre ya presentaba “problemas de disciplina” y fue despedido de sus funciones, según indicó a los medios locales Xinhua, la agencia de noticias estatal.

Aunque en el 2005 China introdujo una ley que prohíbe el acoso sexual y otorga a las víctimas el derecho a presentar denuncias contra sus empleadores, según Darius Longarino, investigador del Centro Paul Tsai China de la Facultad de Derecho de Yale, esto no ha mejorado mucho la situación.

“Se han presentado muy pocas demandas contra los acosadores y las que han tenido éxito son aún menos (…) Si el caso se reduce a relatos de testigos, el tribunal a menudo dictamina que no hay pruebas suficientes para demostrar que ocurrió el acoso", destacó el Times.