Un Tea Party sin remordimientos deja lastimado al Partido Republicano
Obama y sus huestes demócratas, que controlan el Senado se negaron a aceptar lo que denominaron "chantaje" de parte de los republicanos.

WASHINGTON, 17 octubre 2013 (AFP) - Abatido y desorientado: el Partido Republicano sale lastimado de una agotadora batalla presupuestaria que tuvo en vilo a Estados Unidos y al mundo durante dos semanas, pero el Tea Party, el sector ultraconservador que encendió la mecha, no muestra ningún remordimiento.
"Absolutamente, valió la pena", aseguró Michelle Bachmann, fundadora del Tea Party y abanderada de la derecha radical, anti-Estado y anti-impuestos. "Nuestro combate era bueno".
Los representantes se detuvieron unos minutos para hablar con los periodistas en el subsuelo del Capitolio, en el humillante epílogo de la cruzada lanzada en septiembre por el Partido Republicano para abrogar la reforma de la salud, promulgada en 2010, y piedra angular del proyecto político del presidente Barack Obama.
Inicialmente, los republicanos intentaron abolir la reforma. Luego intentaron cortarle el financiamiento. Después demorar su entrada en vigencia. Luego eliminarle algunos artículos.
Resultado: luego de 16 días de parálisis de los servicios no esenciales del gobierno federal a falta de aprobación de un presupuesto para el año fiscal 2014, y de arriesgar un default del país a falta de un aumento del techo de la deuda, el texto del acuerdo que conjuró por el momento la crisis apenas arañó la reforma de la salud.
Obama y sus huestes demócratas, que controlan el Senado se negaron a aceptar lo que denominaron "chantaje" de parte de los republicanos.
Los demócratas afirmaban en la noche del miércoles que el acuerdo que conjuró la crisis reforzaba la reforma de la salud. La derrota es total para el presidente republicano de la Cámara baja, John Boehner, obligado a anunciar a sus tropas la capitulación.
"Fuimos golpeados, eso es seguro", dijo Mick Mulvaney, representante de una circunscripción de Carolina del Sur.
"Pero sigo estando orgulloso de la razón por la que fuimos golpeados", agregó. "Puedo decirle a mis hijos que di lo mejor de mi por buenas razones".
"Le dije a la gente que vine aquí a intentarlo, y eso es lo que hice", dijo Thomas Massie, uno de los representantes más intransigentes del Tea Party.
"Fue una notable victoria ver tanta valentía en la Cámara", se congratuló por su parte el texano Ted Cruz, figura del movimiento ultraconservador en el Senado.
Y uno de sus discípulos, el representante Matt Salmon, aseguró que "esta batalla no terminó. Este fue el primer round".