Ronaldinho Gaúcho, el viejo crack de vuelta en Brasil
La camiseta '10' llevará su nombre en el club Fluminense de Rio de Janeiro, que lo fichó hasta 2016.

Del Mundial a la Copa Libertadores, Ronaldinho Gaúcho ya ganó todo lo que un futbolista puede desear, pero el retiro aún no es una posibilidad para este veterano jugador de 35 años que acaba de volver a Brasil.
La camiseta '10' llevará su nombre en el club Fluminense de Rio de Janeiro, que lo fichó hasta 2016 tras romperse de común acuerdo un millonario contrato en México por indisciplina, esa misma que lo viene acompañando por toda su carrera.
"Después de una linda historia en México fui en la búsqueda de nuevos desafíos. Recibí propuestas para jugar en diferentes lugares del mundo (...). Estoy muy contento de regresar a mi tierra y hacer lo más que amo por un gran club brasileño. Estoy feliz, estoy en casa, soy Flu!!", escribió en su cuenta en las red social Instagram.
Dos veces mejor jugador del mundo para la FIFA (2004 y 2005), Ronaldinho ganó con la selección brasileña la Copa América-1999, el Mundial-2002 y la Copa Confederaciones-2005. Y con el club Barcelona (2003-2008) completa el palmarés soñado con una liga de Campeones (2006) y dos ligas españolas (2005, 2006).
Y ya veterano, el volante ofensivo no tiene la misma aceleración de antaño, cuando era pesadilla de los mejores defensas de Europa, pero lo compensa con su increíble visión de juego y su categoría a la hora de dejar a sus compañeros de cara al gol con sus pases milimétricos.
Fracaso mexicano
El debut de Ronaldinho con el 'Fluzao' aún no está definido. Debe cumplir con una agenda de compromisos antes de sumarse a los entrenamientos a finales de mes.
De cualquier forma, será presentado el próximo domingo en el legendario Maracaná a la hinchada 'tricolor', que esperará ciertamente un mejor desempeño al que tuvo en México con su último club, Querétaro.
Un jugador que vende camisetas que "no suda ni siente" fue la impresión que dejó entre los hinchas 'albiazules', donde mostró muy poco en el campo y mucha indisciplina en el vestuario.
Fue así como el modesto club negoció la ruptura del contrato de 2 millones de dólares por temporada.
El brasileño empezó a tropezar con la afición cuando decidió celebrar las pasadas navidades en su país y llegó un mes tarde a la concentración para su segundo torneo en México.
Y el último choque fue a finales de mayo, cuando abandonó el estadio antes de que terminara el partido de ida de semifinales del Torneo Clausura porque el técnico lo relevó.
Ronaldinho "tiene una calidad enorme, pero necesitamos a los jugadores para que aporten en todos los aspectos (...). El fútbol mexicano necesita gente que vaya en ascenso y no en descenso", lanzó su exentrenador Víctor Manuel Vucetich, que dijo que el fichaje del veterano "mercadológicamente fue un éxito".
Durante su estancia en México, se rumoraba que frecuentaba los bares de la conservadora ciudad de Querétaro y que organizaba grandes fiestas en la mansión donde vivía, donde instaló una barra de bar tan grande como su cancha de fútbol playa.
Fue ese gusto por la rumba nocturna que también le trajo problemas en Europa.
Un gran 2012
Ronaldinho volvió a Brasil en 2011 después de jugar con el PSG, Barcelona y el AC Milán. Entonces fichó con Flamengo, pero rompió su contrato un año después en un pleito judicial por los atrasos en el pago de su salario.
Y firmó con el Atlético Mineiro en 2012 para colocar en la vidriera una Copa Libertadores y una Recopa Sudamericana. Fueron 27 tantos en 85 partidos.
En esos años, regresó a la Seleçao pero no tuvo una actuación destacada. Y un retraso en una concentración fue la guinda para dejarlo fuera de la Copa Confederaciones y después del Mundial-2014.
Por su parte Fluminense, que busca recuperarse de una severa crisis financiera, pagará un salario de 400.000 reales (130.000 dólares) al jugador, según versiones de prensa.
Su debut será además una oportunidad de jugar en el Maracaná, que en 2011 estaba cerrado para ser remodelado para la Copa del Mundo.
Con un elenco principalmente joven, 'Dinho' inyectará experiencia junto al atacante Fred, otro veterano e ídolo 'tricolor', y buscará su primer Campeonato Brasileño.
"Es un genio", dijo de él Fred. Y la 'torcida' espera que lo demuestre en el campo.