Por AFP Agencia |6 de octubre de 2023, 7:34 AM

Varsovia, Polonia | Los servicios diplomáticos deberán verificar las circunstancias de los hechos que llevaron a la detención de dos jugadores del club de fútbol Legia de Varsovia por la policía de Países Bajos, al término de un partido contra el AZ Alkmaar neerlandés, indicó este viernes el primer ministro polaco.

En una publicación en X (antiguo Twitter), Mateusz Morawiecki afirmó haber solicitado a sus servicios "una acción diplomática urgente para verificar los sucesos de la noche".

El jueves por la noche, dos jugadores del Legia -el portugués Josué y el serbio Radovan Pankov- fueron escoltados fuera del autobús del equipo polaco por la policía neerlandesa y llevados a comisaría después del partido de la Conference League contra el AZ Alkmaar, saldado con derrota del Legia 1-0.

Según el club polaco, los dos jugadores se encontraban este viernes por la mañana en la comisaría y no pudieron regresar al país.

"Los jugadores y los aficionados polacos deben ser tratados de conformidad con la ley", añadió el primer ministro polaco, quien calificó de "muy preocupantes" las informaciones procedentes desde Alkmaar.

Según los periodistas polacos presentes durante el partido, se habrían vivido momentos de tensión cuando la policía local y los servicios de seguridad decidieron después del partido cerrar el estadio, supuestamente para evitar un enfrentamiento con un grupo organizado de aficionados del Legia.

La delegación del club polaco, incluidos los jugadores, vieron por ello impedido el acceso al autobús, y se produjeron altercados verbales y empujones.

La policía decidió detener a Josué Pesqueira, el capitán del equipo, y a Radovan Pankov, indicó TVP Sport.

Según los medios polacos, el propietario y presidente del Legia, Dariusz Mioduski, fue inmovilizado en el suelo y los policías rompieron su teléfono celular con el que grababa los hechos.

El viceministro de Asuntos Exteriores polaco Pawel Jablonski indicó este viernes en X que sus servicios analizaban si "la policía neerlandesa y los empleados del club AZ Alkmaar infringieron la ley en contra de ciudadanos polacos (...) debido a su nacionalidad o del uso de la lengua polaca".

La Federación Polaca de Fútbol (PZPN) indicó haber pedido explicaciones ante su homóloga neerlandesa y ante la UEFA.

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