Por AFP Agencia |5 de noviembre de 2020, 5:42 AM

Cientos de policías del estado de Oregón y manifestantes de izquierda mantuvieron un pulso tenso la noche del miércoles en Portland después de que grupos contrarios al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rompieran escaparates de tiendas al día siguente de las elecciones.

El gobernador del estado activó la guardia nacional y las fuerzas de seguridad del condado de Multnomah arrestaron a nueve personas.

La policía advirtió de un posible uso de municiones y gases lacrimógenos ante el avance de los manifestantes, aunque no se registraron enfrentamientos con las fuerzas del orden, según un reportero de la AFP presente en el lugar.

Los manifestantes habían asistido antes a un mitin en un parque del centro de la ciudad organizado por una coalición de grupos anticapitalistas de extrema izquierda.

"La concentración masiva en el centro de Portland todavía se declara un motín. Salga del área ahora", publicó la oficina del sheriff en Twitter poco antes de las 20H30 (04H30 GMT), que informó de que los manifestantes habían lanzado objetos como botellas de vidrio contra los agentes.

"En interés de la seguridad pública, la gobernadora Kate Brown, bajo el asesoramiento del Comando Unificado, ha activado el uso de la Guardia Nacional de Oregón para ayudar a las fuerzas del orden locales", dijo.

Portland ha sido escenario durante meses de enfrentamientos entre la policía y los manifestantes que protestaban por los asesinatos de afrodescendientes a manos de la policía en Estados Unidos.

Los manifestantes que se habían reunido junto al río Willamette prometieron "proteger los resultados" de las elecciones del martes y portaban pancartas en las que se leía "Cuenten cada voto" y "La votación ha terminado. La lucha continúa".

"Queremos a Trump fuera", dijo uno de los líderes de la protesta a la multitud entre fuertes aplausos.

Varios de los manifestantes portaban armas de fuego, como rifles. En una de las pancartas contra el racismo y el antiimperialismo de la marcha contenía la imagen de un rifle de asalto y la consigna "No queremos a Biden. Queremos venganza".