Internacional

Mubarak abandonará la prisión para pasar a arresto domiciliario

Un tribunal ordenó el miércoles la puesta en libertad de Mubarak a la espera del proceso por un caso de corrupción, el último que le retenía entre los barrotes.

Por AFP Agencia |NaN de Invalid Date de NaN, NaN:NaN AM

EL CAIRO, 22 agosto 2013 (AFP) - El ex presidente egipcio Hosni Mubarak, derrocado por una revuelta popular a principios de 2011, abandonará este jueves la prisión de El Cairo para pasar a arresto domiciliario, probablemente en un hospital militar, antes del juicio previsto este domingo por el asesinato de manifestantes.

El ejército, que dirige de facto el país después de la destitución del sucesor de Mubarak, el islamista Mohamed Mursi, atajó rápidamente las especulaciones sobre su liberación, al afirmar que se encontraría bajo "arresto domiciliario" probablemente en un hospital militar, según responsables de seguridad.

Según altos responsables del ministerio del Interior, citados por la agencia oficial Mena, un helicóptero militar recogería a Mubarak a su salida de la prisión cairota de Tora, donde permanece desde abril de 2011, y lo trasladaría a uno de los hospitales militares, en los que estuvo ingresado tras su arresto.

La salida de prisión de Mubarak, de 85 años y enfermo, se produce en un momento en el que la policía lleva a cabo una campaña de represión sangrienta contra manifestantes partidarios de Mursi, primer presidente elegido democráticamente en Egipto.

Mursi, perteneciente a los Hermanos Musulmanes, se encuentra detenido en un lugar secreto por el ejército desde su destitución por un golpe militar el 3 de julio de 2013 y acusado de ser cómplice de asesinatos.

Un tribunal ordenó el miércoles la puesta en libertad de Mubarak a la espera del proceso por un caso de corrupción, el último que le retenía entre los barrotes.

No obstante, la fiscalía debe aún este jueves anunciar oficialmente que ningún cargo permite mantener al ex presidente en prisión. Mubarak puede ser también inculpado de nuevos cargos para mantenerlo en detención preventiva, como ha sucedido hasta el momento.

Independientemente de la decisión de la fiscalía, Mubarak deberá responder, en un juicio previsto para el domingo en El Cairo, a las acusaciones de "asesinato de manifestantes" durante la revuelta de enero y febrero de 2011.

El juicio tendrá lugar el mismo día en el que dirigentes de los Hermanos Musulmanes, entre ellos, el guía supremo Mohamed Badie y dos de sus adjuntos, comparecerán en otro proceso por "incitación al asesinato" de manifestantes anti Mursi el 30 de junio.

En la última semana, más de mil personas han fallecido, en su mayoría partidarios de Mursi, a consecuencia del enfrentamiento entre las fuerzas del orden, autorizadas a disparar, con los partidarios del presidente islamista. Unos 1.000 islamistas han sido detenidos, entre ellos, el portavoz de la cofradía, Ahmed Aref.

Pese a que desde hace cuatro días no hay casi protestas, los Hermanos Musulmanes han instado a grandes manifestaciones el viernes, bajo el lema "viernes de los mártires". Esta jornada podría constituir un test para la capacidad de movilización de la cofradía.

El ejército se apoyó en la gran movilización en contra de Mursi el 30 de junio para justificar su destitución. Una gran parte de los egipcios reprochaban al presidente derrocado haber acaparado el poder en beneficio de los Hermanos Musulmanes y de acabar de arruinar una economía exigua.

Tras los últimos episodios de violencia, la Unión Europea y Washington advirtieron de la posibilidad de revisar las ayudas financieras aportadas a Egipto, pero Arabia Saudita y sus aliados del Golfo prometieron aportar su ayuda económica al país para compensar las ayudas perdidas.