Por AFP Agencia |13 de octubre de 2017, 17:01 PM

La policía italiana anunció este viernes haber registrado una mansión en Porto Cervo, en Cerdeña, que sería según los investigadores el "medio de corrupción" utilizado por el presidente de BeIn Media, Nasser Al-Khelaifi, también patrón del PSG, con Jérôme Valcke, exnúmero dos de la FIFA.

Según un comunicado de la policía italiana, la mansión en cuestión, cuyo valor está estimado en siete millones de euros, "constituye el medio de corrupción utilizado por Nasser Al-Khelaifi (con Jérôme Valcke) para adquirir los derechos televisivos de los Mundiales de la FIFA de los años 2018 a 2030".

La "Villa Bianca" pertenece a una sociedad inmobiliaria establecida internacionalmente, pero estaba a disposición de Jérôme Valcke, según el mismo comunicado. 

La operación de este viernes fue realizada en presencia de un "representante del ministerio público de la Confederación Helvétca".

La policía italiana precisa que varias personas, "ligadas a la sociedad propietaria de la mansión" fueron interrogadas, siendo también incautados documentos y material informático.

El jueves, el ministerio público de la Confederación Helvética había anunciado que estaba investigando este caso desde el 20 de marzo de 2017, contra Jérôme Valcke, exsecretario general de la FIFA, ya suspendido diez años por otros casos de corrupción, y el catarí Nasser Al-Khelaifi, presidente de la sociedad beIN Media, "en relación a la concesión de los derechos a los medios de comunicación para los Mundiales de fútbol".

La investigación fue abierta por "sospechas de corrupción privada, estafa, gestión desleal y falsificación de documentos", indicó el ente público suizo, precisando que una operación "coordinada" fue llevada a cabo simultáneamente en Francia, Grecia, Italia y España, en el marco de este proceso.

Investigación de FIFA a Al Khelaifi

Al mismo tiempo, la comisión de ética de la FIFA abrió este viernes una investigación preliminar contra Nasser Al-Khelaifi, un día después de que la justicia suiza abriera su investigación.

La oficina parisina de la cadena de televisión catarí beIN Sports fue registrada el jueves. 

El Grupo beIN Media rechazó "todas las acusaciones", añadiendo que colaborará "plenamente con las autoridades y espera con serenidad las conclusiones de la investigación".

Tras ser detenido el jueves Valcke quedó libre unas horas más tarde, abandonando los locales del Ministerio Público de Suiza en Berna. Declaró en L'Equipe de este viernes "no haber recibido nada de Nasser".

La esposa de Valcke, que le acompañaba en Suiza, "también testificó pero en Lausana", informó otra fuente judicial. 

La pareja Valcke debía después viajar a Barcelona el jueves, donde vive ahora.

Una tercera persona, un hombre de negocios "activo en el campo de los derechos deportivos", también está siendo investigado por el ministerio público, que no comunicó su identidad.

Los problemas se acumulan para Al-Khelaifi, ya que el PSG, del que es presidente desde la compra del club por parte de un fondo soberano de Catar en 2011, es objeto de una investigación por parte de la UEFA. 

El club es sospechoso de haber infringido las reglas del fair-play financiero (no gastar más de lo que se gana) con los fichajes de Neymar (222 millones de euros) y Kylian Mbappé (180). 

Valcke está acusado de haber "aceptado ventajas tras la concesión de derechos de medios de comunicación en algunos países". 

El Mundial de 2018 fue otorgado a Rusia y el de 2022 a Catar, país de Al-Khelaifi, próximo del emir, en una doble votación del Consejo de la FIFA en 2010. Las ediciones de 2026 y 2030 no han sido todavía atribuidas.

Desde 2015, la FIFA se vio golpeada por el mayor escándalo de corrupción de su historia. La justicia suiza abrió una investigación sobre las condiciones de atribución de los Mundiales de 2018 y 2022, sobre los que pesan fuertes sospechas de corrupción. 

Desde entonces, muchos exresponsables del fútbol mundial fueron detenidos y fueron objeto de demandas de extradición de la justicia estadounidense. El proceso de varios de ellos debe comenzar en noviembre antes un tribunal de Nueva York.

Valcke, detenido el jueves por la mañana a la salida de un hotel en Ginebra, había declarado en la víspera ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) en Lausana, donde trató de reducir o anular su suspensión de 10 años. 

Ante el TAS, rechazó su implicación en un caso de reventa de entradas del Mundial-2014 por lo que fue destituido en la FIFA en septiembre de 2015. Por estos hechos, el ministerio público suizo recordó que Valcke era objeto de un proceso penal.