Por AFP Agencia |4 de noviembre de 2020, 8:02 AM

Manifestantes quemaron banderas estadounidenses y marcharon por la ciudad de Portland armados con rifles de asalto y canciones de protesta, pero sin desatar violencia, en la tensa noche electoral del martes en Estados Unidos.

Esta ciudad liberal de Oregón, en el noroeste del país, se había preparado en previsión de posibles enfrentamientos armados tras meses de protestas y choques entre activistas de izquierda, milicias de derecha y agentes federales desplegados por el gobierno de Donald Trump.

Mientras en la madrugada Trump proclamaba su victoria en la elección pese a que el escrutinio está lejos de haber terminado, los activistas se congregaron afuera del corte federal de Portland, epicentro en esta ciudad de las protestas antirracistas que se produjeron en todo el país en el verano boreal.

"No nos gusta ninguno de los dos candidatos, voté avergonzado por Biden, pero si Trump obtiene otros cuatro años, la gente se enojará", dijo un manifestante de 20 años, que pidió que lo llamaran "L", mientras se quemaban dos banderas estadounidenses frente al edificio de la corte federal.

Muchos gritaban consignas contra Trump y contra el alcalde de la ciudad, Ted Wheeler, detestado por los manifestantes y quien fue reelegido el martes; mientras otros bailaban al ritmo del hip hop.

El FBI advirtió sobre la posibilidad de enfrentamientos armados en Portland durante la elección, pero no hubo señales de actividad nocturna por parte de grupos de derecha como los Proud Boys.

Y en la madrugada del miércoles, no se habían producido choques entre la policía y los manifestantes, algunos de los cuales ya habían participado en una marcha pacífica de Black Lives Matter (Las vidas negras importan), de unas 400 personas, en el este de la ciudad.

La marcha, que se prolongó durante tres horas, fue encabezada por un convoy que contó con al menos media docena de activistas armados con rifles de asalto, cuchillos y una escopeta.

"Escuché que Trump tiene el impulso ahora", dijo Ty Ford, de 20 años, uno de los líderes de las protestas. "Va a ser un tumulto. Cuando se sepa, será una locura".

"Es como elegir entre dos males, pero honestamente, nos arreglamos con Biden", señaló "D.D.", otro de los líderes de 22 años.

Los reclamos van desde la abolición del ICE (policía migratoria) hasta justicia para las víctimas de la brutalidad policial, incluyendo a los afroestadounidenses George Floyd y Breonna Taylor. La marcha terminó con una interpretación de la canción "Hallelujah".

También hubo momentos distendidos cuando los líderes de la protesta invitaron a los curiosos que miraban la marcha desde las ventanas de sus apartamentos para que se unieran a la manifestación.

"Oye, saca la cabeza por la ventana y cuéntanos cómo van las elecciones, y luego tal vez te puedes calzar y venir a ayudarnos a iniciar una revolución", gritó un activista.