Internacional

Maduro reorganiza el Gobierno venezolano tratando de apuntalarlo

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reorganizó el martes su gabinete ministerial buscando apuntalar su gobierno socialista.

3 de septiembre de 2014, 2:50 AM

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reorganizó el martes su gabinete ministerial buscando apuntalar su gobierno socialista en un momento en el que el país atraviesa una aguda crisis económica.

Rafael Ramírez, uno de los hombres fuertes del "chavismo", fue sustituido en la presidencia de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), en el Ministerio de Petróleo y Minería y en la vicepresidencia del Área Económica para pasar a encabezar el Ministerio de Asuntos Exteriores.

Con este cambio, uno de los más esperados por analistas y que saca a Ramírez de una cartera que ocupaba desde hace 12 años, el nuevo ministro de Petróleo y Minería será Asdrúbal Chávez, primo del fallecido Hugo Chávez.

Chávez, ingeniero químico de profesión, viene de ser el vicepresidente de Comercio y Suministro de PDVSA.

"Tiene que iniciarse una nueva etapa de la revolución bolivariana (...) de renovación, de refrescamiento", dijo Maduro en una cadena de radio y televisión.

Sin embargo, analistas opinan que el enroque de Maduro poco más de un año después de asumir el cargo de presidente no supone cambios de magnitud, puesto que son los mismos nombres que han ocupado distintos cargos durante los 15 años de gobierno socialista que comenzó con el primer mandato de Chávez en 1999.

"El presidente privilegia el escenario de mantener el statu quo. Esto indica que el país mantendrá un deterioro indetenible de su economía", dijo el analista político Luis Vicente León.

Recientes encuestas aseguran que la profundización de la crisis económica, evidenciada en un persistente desabastecimiento de productos básicos y una inflación superior al 60 por ciento, ha mellado la popularidad de Maduro.

Analistas y gremios privados auguran que la economía habría entrado en recesión y sugieren la aplicación de medidas "impostergables" como la unificación de los tres tipos de cambio vigentes, la flexibilización de los precios de algunos productos controlados, la reducción del gasto público y un freno a la liquidez monetaria.

Sin embargo, Maduro no anunció ninguna medida económica concreta en ninguno de estos sentidos.

"Hemos sometido a la interpelación más aguda a todos los ministros y ministras y ¿qué nos encontramos? Con lo que sabemos que aún existe: los restos del estado burgués, del burocratismo, de la corrupción, por allí pululando", dijo Maduro en un inusual reconocimiento.

CAMBIOS EN PDVSA
Dentro de la llamada "revolución dentro de la revolución", Maduro nombró a Eulogio Del Pino como presidente de PDVSA, cargo que había estado en manos de Ramírez desde 2004.

Del Pino, ingeniero geofísico con maestría en Estados Unidos, era vicepresidente de Exploración y Producción de PDVSA.

Las operaciones de PDVSA, que aporta el 90 por ciento de los dólares que entran al país, son cruciales para que el Gobierno de Maduro contenga la elevada inflación y la desaceleración del crecimiento económico.

Del Pino asumirá una empresa que ha fallado en cumplir con su ambiciosas metas de producción pese a contar con la Faja Petrolífera Hugo Chávez, la mayor reserva de petróleo del mundo, aunque el gobierno insiste en que el país mantiene un nivel de producción ajustada a las cuotas autorizadas por la OPEP.

Ramírez también fue apartado de la vicepresidencia Económica y el cargo será ocupado por el ministro de Economía y Finanzas, el militar Rodolfo Marco, quien fue ratificado en esa cartera.

Como ministro de Exteriores, en reemplazo de Elías Jaua - que irá al Ministerio de Comunas y Movimientos Sociales -, fue nombrado Ramírez.

Además, Maduro ratificó al yerno de Chávez, Jorge Arreaza, en la vicepresidencia del país y cambió a los ministros de Transporte y Comercio, entre otros.