Internacional

Klinsmann lamenta suspensión y asegura nada cambiará en EEUU para final de Copa Oro

Estados Unidos saldrá en busca de su quinta corona de Copa Oro cuando enfrente al seleccionado de Panamá, que irá por su primer título regional

Por AFP Agencia |27 de julio de 2013, 9:23 AM

CHICAGO, 27 julio 2013 (AFP) - El alemán Jurgen Klinsmann, seleccionador de fútbol de Estados Unidos, lamentó la suspensión de un partido que le impuso la Concacaf y le privará el domingo de la final de la Copa Oro 2013 contra Panamá, pero aseguró que "nada cambiará" en la forma que su equipo enfrentará el desafío.

Estados Unidos saldrá en busca de su quinta corona de Copa Oro cuando enfrente al seleccionado de Panamá, que irá por su primer título regional, en la final prevista para el estadio Soldier Field de Chicago.

Pero los estadounidenses tendrán la gran baja de su directo técnico, a quien el Comité Disciplinario de la Concacaf suspendió por un partido por comportamiento inadecuado en el encuentro de semifinales que Estados Unidos le ganó a Honduras (3-1), el pasado miércoles en Dallas (Texas).

Klinsmann estuvo muy descontento con el trabajo arbitral del costarricense Walter Quesada, al extremo que en los minutos finales lanzó fuertes críticas al silbante, quien le expulsó del partido luego de que el alemán, muy furioso, estrallara un balón contra el suelo. Al finalizar el tope hizo un gesto grosero con la mano hacia el terreno.

"Sé que mi comportamiento no fue correcto, pero nos estaban dando palos de todos los tipos y él (Quesada) no sacaba una tarjeta para nada. Eso me llevó a hacer lo que hice por frustración", reconoció el DT alemán este sábado, en vísperas del enfrentamiento contra Panamá.

Preguntado sobre si el equipo estadounidense alteraría sus planes ante su ausencia, el 'Kaiser K' respondió rotundo: "Para nada, todo sigue igual".

"Esperamos un juego físico, Panamá es un equipo que defiende muy bien, pero esperamos que mi ausencia en el banquillo no tenga eco", aseveró.

En su ausencia, será su asistente de larga data, el mexicano-estadounidense Martin Vázquez, quien dirija al combinado del Tio Sam.

"Confiamos en Martin y estamos trabajando en trazar las líneas del partido", manifestó Klinsmann.

Los jugadores norteamericanos también lamentaron la ausencia de su entrenador, pero igual insistieron en que saldrán a jugar sin presión para conseguir un título que se les ha escapado en las últimas dos finales de Copa Oro jugadas contra México (2009 y 2011).

"Es lamentable la ausencia de JK. Pero también es una oportunidad de enseñar a los más jóvenes el espíritu del equipo; el mensaje es estar confiados en el equipo, jugar para el equipo y pensar en el equipo", subrayó Landon Donovan, el jugador referente del seleccionado del Tio Sam.

El capitán del seleccionado norteño, el defensor DaMarcus Beasley, aseguró que el planteo táctico del equipo "no cambiará demasiado".

"Siempre es bueno tenerlo en el banco, pero sabemos que nos va a dar su sabiduría antes del partido, asegurarnos de que salgamos con el pie derecho al terreno", añadió Beasley.

Beasley también criticó el trabajo del árbitro Quesada, y su permisividad ante el juego duro que estaban desplegando los hondureños.

"Yo estuve hablando con el árbitro también. No sacó ningún cartón", dijo Beasley. "Me golpearon tres, cuatro veces al menos en la misma secuencia, y esa era una clara falta pero él se trago el silbato. Así que puedo entender la frustración de JK".

A lo interno del torneo se supo que la demora de 48 horas que tuvo Concacaf en dar a conocer la sanción a Klinsmann fue debido a las largas conversaciones que sostuvieron tras bambalinas los federativos estadounidenses y patrocinadores del torneo para evitar la suspensión.

"Se estuvo manejando el argumento de que la suspensión a Klinsmann iría en detrimento del espectáculo, pero Concacaf fue inflexible", dijo a la AFP uno de los organizadores del torneo, a condición de mantener el anonimato.

Por la forma en que está jugando Estados Unidos es difícil que pierda su rumbo por un mal paso de su técnico. De hecho, ésto podría impulsar más a los del Tio Sam.

"Esta es la oportunidad que el fútbol americano ha estado esperando, tener un entrenador con tanta experiencia, que ha jugado al más alto nivel y dirigido equipos grandes y a grandes jugadores, y ahora debemos demostrarle que estamos listos para ir hacia el futuro".