Por AFP Agencia |26 de junio de 2022, 8:58 AM

Kiev, Ucrania | Kiev amaneció de nuevo este domingo bajo bombardeos, que dejaron al menos un muerto y cuatro heridos, en un barrio que ya había sido atacado en las últimas semanas.

"Hubo cuatro misiles a partir de las 06H30 (03h30 GMT)", dijo Edouard Chkouta, un habitante de ese barrio, acomodado, del noroeste de la capital ucraniana. Alcanzaron un edificio "directamente en los últimos pisos y vi gente herida", agregó.

"Fui al balcón y vi caer misiles y escuché una explosión enorme, todo vibró", dijo a AFP Yuri, un residente de 38 años, que se negó a dar su apellido.

Uno de los misiles cayó en un parque de juegos cercano, al parecer sin causar víctimas.

Según un nuevo balance comunicado por el alcalde Vitaly Klitschko, "se encontró un cuerpo y seis residentes resultaron heridos, cuatro de los cuales fueron hospitalizados, entre ellos una niña de siete años".

La niña estaba "fuera de peligro" tras haber sido sacada de los escombros, y fue operada en el hospital, precisó. Su madre, cuyo rescate tomó varias horas, se encontraba "en estado de gravedad moderada", explicó el primer edil.

AFP asistió al rescate de la madre de la niña, que llevó varias horas. Estaba atrapada bajo un bloque de hormigón, según los rescatistas. Las autoridades la presentaron como una ciudadana de la Federación Rusa, de unos 30 años.

En un primer momento, Klitschko mencionó que el ataque había dejado cuatro heridos. No dio detalles sobre la persona fallecida.

Es la tercera vez desde que empezó la invasión rusa, el 24 de febrero, que ese barrio, no muy distante del centro histórico de Kiev, es blanco de ataques. Fue bombardeado por primera vez a mediados de marzo y, luego, el 28 de abril, cuando el secretario general de la ONU, António Guterres, visitó la capital ucraniana. Una periodista ucraniana de Radio Liberty murió en ese ataque.

El barrio alberga una fábrica de armamento, llamada Artem, fundada a finales del siglo XIX, que produce sobre todo cohetes aire-aire y antitanques y misiles de gran calibre, según un portal especializado ucraniano.

Horas después del bombardeo, el Ministerio ruso de Defensa confirmó que esa fábrica era el "blanco" del bombardeo y que un misil ruso "alcanzó de forma precisa [sus] talleres". Según el ministerio, los daños ocasionados en un edificio residencial aledaño los causó un misil ucraniano de la defensa antiaérea.

Un portavoz de la fuerza aérea ucraniana indicó que los bombardeos se efectuaron con misiles que "probablemente" eran del tipo "X101", disparados desde bombarderos TU-95 y TU-160 desde el mar Caspio.

"Intimidar" antes de la cumbre

Se trata de "intimidar a los ucranianos (...) ante la proximidad de la cumbre de la OTAN", que se llevará a cabo en Madrid del 28 al 30 de junio, declaró Klitschko.

Más tarde, instó a los capitalinos a mantenerse vigilantes. Muchos habitantes de Kiev hacen caso omiso a las alertas casi diarias para que busquen refugio.

El enemigo "intenta intimidarnos, sembrar el pánico y la desesperación. ¡Mantengamos la vigilancia! Respetemos las reglas de seguridad básica que podrán salvarnos la vida. En cuanto escuchen la señal de alarma, bajen a los refugios, no dejen de lado su seguridad", subrayó.

Poco después de los bombardeos, muchos residentes, entre ellos una mujer en bata de baño, estaban al pie de los edificios. Muchos de ellos lloraban, mientras los equipos de rescate empezaban a evacuar al los vecinos.

Irena, de 32 años, salió con su hijo Makar, de 17 meses. "Bajamos con nuestra mochila de emergencia que está al lado de la puerta desde el comienzo de la guerra porque tuvimos que evacuar", dijo.

El último ataque ruso en junio fue contra una fábrica en la periferia de Kiev y dejó un herido. Las sirenas de alerta aérea resuenan no obstante casi a diario, instando a los vecinos a refugiarse. Las de este domingo por la mañana sonaron durante más de cinco horas.