Por AFP Agencia |30 de agosto de 2021, 5:19 AM

El poderoso huracán Ida azotó el estado sureño de Luisiana y sumió la noche del domingo a Nueva Orleans en la oscuridad, dejando al menos una persona muerta, 16 años después de que el huracán Katrina devastara la ciudad.

Ida irrumpió el domingo por la tarde en las costas de Luisiana como huracán categoría 4 pero horas después se había degrado a la categoría 1.

La tormenta dejó sin electricidad a toda Nueva Orleans, afectando a más de un millón de usuarios, según el sitio PowerOutage.US

"¡Hemos perdido la electricidad en toda la ciudad! Es hora de quedarse en casa, en lugares seguros. No es el momento de aventurarse al exterior", tuiteó la alcaldesa de Nueva Orleans LaToya Cantrell.

Una persona murió por la caída de un árbol en la localidad de Prairieville, al noroeste de Nueva Orleans, dijeron autoridades locales.

A las 04H00 GMT del lunes (23H00 local del domingo), Ida avanzaba con vientos de 153 km/h, menos violentos que cuando tocó tierra horas antes, a las 17H00 GMT del domingo, a unos 60 km al sur de Nueva Orleans.

El huracán fue precedido por fuertes vientos y lluvias desde las primeras horas del domingo.

Nueva Orleans se convirtió en una ciudad de ventanas tapiadas y casas rodeadas de bolsas de arena, a la espera de este huracán que fue catalogado como "extremadamente peligroso".

El Centro Nacional de Huracanes (NHC en inglés) dijo que Ida creó una "situación de peligro de muerte" y urgió a "tomar todas las medidas necesarias para proteger su vida y propiedades".

En la localidad de Jean Lafitte, al sur de Nueva Orleans, el alcalde Tim Kernet habló de una "devastacion total, catastrófica" con "los diques de la ciudad superados" por las aguas, a una emisora local.

"Entre 75 y 200 personas están bloqueadas" en la reserva de Barataria, y "los vientos son muy fuertes para ir en barco a buscarlas", agregó.

"No estoy seguro de estar preparado"

El presidente Joe Biden consideró a Ida "una tormenta que amenaza las vidas" y que "sigue devastando todo aquello con lo que hace contacto".

Para el gobernador John Bel Edwards, podría tratarse de la mayor tormenta en golpear Luisiana desde la década de 1850.

"No cabe duda de que los próximos días y semanas serán extremadamente difíciles", dijo el domingo, añadiendo que algunas personas deberán permanecer refugiadas hasta por 72 horas.

"Encuentre el lugar más seguro de su casa y quédese allí hasta que pase la tormenta", tuiteó más temprano.

La localidad de Grand Isle, en una isla barrera ubicada al sur de Nueva Orleans, ya estaba inundada por el aumento del nivel de las aguas, reportó CNN.

La mayoría de los habitantes hicieron caso de las advertencias de las autoridades y huyeron de la zona días antes de la llegada de la tempestad, saturando las salidas de Nueva Orleans y otras ciudades.

En un vecindario del este de la urbe, el domingo terminaban los últimos preparativos.

"No estoy seguro de estar preparado", dijo Charles Fields, quien en ese momento aún llevaba al interior de su casa sus muebles de jardín, "pero tendremos que enfrentarlo".

En 2005, el huracán Katrina inundó la casa de este hombre de 60 años hasta unos 3,3 metros. "Veamos cómo aguanta" esta vez, dijo.

Katrina anegó el 80% de Nueva Orleans, dejando 1.800 muertos y miles de millones de dólares en daños.

"Muy importante prueba"

El gobernador Edwards advirtió que Ida será "una importante prueba" para el sistema de prevención de inundaciones del estado, que fue expandido tras el devastador paso de Katrina.

Y explicó a CNN que se estima que cientos de miles de residentes evacuaron sus casas.

La tormenta "trae varias dificultades para nosotros, con los hospitales tan llenos de pacientes de covid-19", agregó.

El estado sureño, con una baja tasa de vacunación, ha estado entre los más golpeados por el coronavirus. Con 2.700 hospitalizaciones al sábado, los niveles están cerca de los más altos de la pandemia.

Ello ha complicado los planes para hacer frente a este huracán y para activar los refugios.

Biden, quien declaró el estado de emergencia en Luisiana, urgió el sábado a que cualquier persona que esté en los refugios porte mascarilla y mantenga la distancia de seguridad.

Los científicos han advertido sobre un aumento en la cantidad de ciclones fuertes a medida que la superficie del océano se calienta debido al cambio climático, lo que representa una amenaza cada vez mayor para las comunidades costeras del mundo.