Internacional

El juicio contra Zimmerman continúa con la declaración de testigos clave

El juicio por la muerte el 26 de febrero de 2012 del adolescente negro Trayvon Martin continúa hoy en un tribunal de Florida.

27 de junio de 2013, 2:42 AM

Miami (EE.UU.), 27 jun (EFE).- El juicio por la muerte el 26 de febrero de 2012 del adolescente negro Trayvon Martin, de 17 años, a manos del vigilante voluntario George Zimmerman, de 29 años, continúa hoy en un tribunal de Florida (EE.UU.) con la declaración de testigos clave.

Este miércoles comparecieron dos testigos relevantes en el caso: Jayne Surdyka, vecina de la población de Sanford donde se produjo el incidente fatal, y Rachel Jeantel, amiga de Martin y la última persona que habló con él por teléfono antes de que recibiera el tiro que acabó con su vida.

La defensa del exvigilante de origen hispano fue muy inquisitiva este miércoles con Jayne Surdyka, una testigo clave del caso que se ha convertido en uno de los más mediáticos de los últimos años en el país.

Surdyka declaró que oyó voces altas, como un altercado, y el grito de un chico pidiendo ayuda poco antes del tiro que puso fin a la vida del adolescente.

La mujer asumió que la voz más suave correspondía a la de Martin, la de un chico, y la más agresiva, dominante y profunda a Zimmerman, el exvigilante que mató de un tiro a bocajarro al adolescente negro esa noche lluviosa.

Si embargo, el abogado de Zimmerman, Don West, le preguntó si ella no pensaba que las voces de las personas pueden cambiar al entrar en la pubertad y ser "mas resonantes", a lo que la testigo respondió que sí.

Previamente, el público y jurado compuesto de seis mujeres escuchó la grabación telefónica que recogió la llamada que efectuó la mujer, muy alterada, llorosa, casi en estado de "shock", a la policía para alertar sobre el fatal incidente.

Zimmerman, de madre peruana, está acusado de asesinato en segundo grado y, de ser declarado culpable, podría afrontar una condena de cadena perpetua. El exvigilante siempre ha mantenido que actuó en defensa propia.

Este jueves, la defensa continúa con el interrogatorio a Rachel Jeantel, de 19 años, quien ayer aseguró que había oído a Martin gritar en la llamada telefónica: "get off, get off" (quítate de encima).

La joven afroamericana, que en muchos momentos parecía no entender las preguntas que le formulaba la defensa y se mostraba malhumorada, señaló que Martin le dijo que intentaba huir de un hombre que le vigilaba y se quejaba de que alguien le seguía, por lo que echó a correr hasta quedarse sin aliento, según explicó la chica.

"Tiene que entender que soy la última persona que habló con él (Martin). No sabe cómo me siento", respondió a una pregunta de la defensa, quien pasó a veces dificultades para entender lo que la testigo relataba.

La muerte del adolescente afroamericano se produjo cuando Martin regresaba, cuando ya había caído la noche, a la casa de la pareja de su padre y caminaba por la urbanización de Sanford con la capucha del suéter puesta, lo que despertó las sospechas de Zimmerman.

Jeantel, quien admitió haber metido con anterioridad sobre su edad, fue la persona a la que Martin llamó por el teléfono móvil antes de que el enfrentamiento con Zimmerman le costara la vida.

La defensa continúa hoy intentando convencer al jurado de que las declaraciones de la joven sobre el incidente fatal que causó la muerte del Martin son inconsistentes.

Por su parte, la Fiscalía instó esta semana al jurado a que acepte como prueba relevante el estado mental de Zimmerman cuando mató de un tiro de pistola a Martin.

Para ello, el Estado presentó varias grabaciones telefónicas de 2011 y 2012 que recogen llamadas no de emergencia que Zimmerman efectuó a la Policía.

La estrategia de la Fiscalía pasa por demostrar que el medio centenar de llamadas telefónicas de Zimmerman a las autoridades locales demuestran el celo excesivo del vigilante durante años en seguir a todo aquel que consideraba sospechoso.

Más de un año después de que Zimmerman matara de un tiro a Martin en la pequeña población de Sanford (centro de Florida) prosiguió hoy el cuarto día del juicio contra el exvigilante ante la jueza Debra Nelson, encargada del caso, y el jurado.

La Fiscalía hizo hincapié en la importancia de las pruebas que recogen, en opinión del estado, el estado mental de "enfado" y "hostilidad" de Zimmerman el día del asesinato.

Si embargo, la defensa contraatacó con el argumento de que son pruebas irrelevantes, secundarias y circunstanciales, que no tienen conexión directa con el cargo de asesinato contra Zimmerman y que, por lo tanto es "inadmisible" aceptar como prueba el "esto mental" del exvigilante.

La Fiscalia retrató en la audiencia a Zimmerman como un vigilante que "disparó por que quiso" al adolescente negro desarmado y que lo hizo influido por su "perfil" (no utilizó el término "perfil racial" porque el tribunal ha prohibido su uso) y no en defensa propia.

"Cuando Zimmerman vio a Trayvon, explicó el fiscal John Guy, "no vio a un adolescente caminando hacia su casa", en lugar de eso, le identificó como "alguien que iba a cometer un crimen en el vecindario y actuó contra" el muchacho, "y por eso estamos aquí", dijo.

"La policía le dijo (a Zimmerman) cuando llamó que no siguiera a Trayvon Martin "ni se enfrentara a él; solo que le observara y llamara" para detallar lo que sucedía, pero el vigilante del condominio desoyó esta orden y asesinó al joven, fue tajante el fiscal.